Querétaro

De enfermero a luchador, “Coronavirus” combate a la pandemia

| 14:46 Ricardo Sánchez

Los rings del pancracio mexicano jamás han tenido a nadie tan letal, pues en Querétaro ha nacido el “Coronavirus”, un luchador que combate al COVID-19 dentro del cuadrilátero y fuera de él.

Además de luchador, el “Coronavirus” es enfermero.

“Mi nombre es Coronavirus y tengo 14 años dentro del deporte del pancracio; mis profesores, que en paz descansen, son Tino Herrera, ‘el enfermero’, y ahorita en la actualidad: el ‘Profesor Atómico’ que es el profesor de grandes estrellas de aquí de la ciudad de Querétaro”.

Coronavirus, luchador de pancracio y enfermero.

Dueño de llaves, candados y castigos extremos, encima del ring muestra sus mejores habilidades, pero ya sin su traje, por la mañana, el “Coronavirus” libra la batalla contra el COVID-19 como enfermero del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

“Se me dieron las dos cosas al mismo tiempo: tengo 14 años siendo enfermero, como 14 años siendo gladiador. Mi debut fue un 6 de enero de 2007 y empecé a trabajar como enfermero el 26 de enero del mismo año, entonces todo se me dio junto”.

Coronavirus, luchador de pancracio y enfermero.
Foto: Ricardo Sánchez

A pesar del dolor vivido sobre el encordado, los golpes más duros los vive al interior del hospital:

“En mi faceta como enfermero, me preparo, pero ahorita en esta ocasión nos agarró de bajada el tener que portar un equipo 11 horas, 8 horas, el estar dentro del covitario. Te deshidratas, no comes porque no puedes salir y tienes que estar con el equipo al 100 %, no poder ir al baño; a muchos compañeros les ha generado infecciones de vías urinarias, principalmente las damas. Muchos compañeros se han desmayado”.

Coronavirus, luchador de pancracio y enfermero.

Su debut resultó afortunado, pues en su primera lucha se adueñó del trofeo en disputa.

“Fue una experiencia muy bonita el debut del Coronavirus, y qué mejor que ganándose la copa COVID19 ante grandes rivales como Hangellus, Datan, el Perro Negro y el Perro García. En una lucha extrema, lo que más me apasiona es poder vivir la adrenalina que se vive al tronarse una lámpara, un alambre de púas, o un sillazo”.

Coronavirus, luchador de pancracio y enfermero.

Son múltiples los obstáculos que ha sorteado para poder continuar con su carrera como luchador extremo: desde el tiempo para entrenar, hasta el hecho de que las funciones son ante un aforo muy reducido. Sin embargo, hay algo que tiene claro: al menos en los encordados, el “Coronavirus” llegó para quedarse.

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