Puebla, en la última semana, ha sido el escenario de dos casos de asesinatos estremecedores que han sido documentados a nivel nacional y que, por lo atroces, se quedaron en la memoria de todo el país.
“Decapitador de suegros” (2021)
Policías de Puebla detuvieron a Juan Carlos “N” mientras intentaba deshacerse de dos cabezas humanas en el río Atoyac, las cuales eran de sus suegros. Tras su captura, al rendir la versión de los hechos, el hombre de 28 años confesó que asesinó a sus suegros luego de que lo corrieran de su hogar.
La “matanovios” que encajueló a su ex (2021)
En Puebla, un triángulo amoroso terminó con un muerto en la cajuela y dos detenidos, una mujer y un menor de edad. El cadáver era el exnovio de ella. El crimen, originado en Ixtapaluca, Estado de México, terminó en el Periférico Ecológico de Puebla con la detención de una pareja con el cadáver del exnovio. Andrea Guadalupe “N” presuntamente torturó y asesinó a su expareja en complicidad con su novio de sólo 16 años de edad.
El “Halcón”, el monstruo de Puebla que grabó sus crímenes (2011)
El 12 de julio del 2011, Alan Emmanuel Aparicio, el “Halcón”, engañó a su novia Irma Flores con un supuesto viaje a Monterrey donde le ofrecían trabajo. Ella quiso acompañarlo y llevó a sus dos hijas, Brisa y Abril. El hombre las asesinó.
El crimen fue cometido con gran saña y grabado con un celular. Alan Emmanuel era aficionado al cine gore, un género que se caracteriza por el exceso de violencia. En el video se puede ver al propio Alan vestido de negro, con una larga gabardina y una capucha que le cubre la cabeza; lleva puesta una máscara del luchador la “Parka“, y dentro de su mochila escondía las tijeras y la hoz con las que fueron desolladas las tres víctimas.
Adán y la masacre de Coxcatlán (2016)
Adán N. llegó a la comunidad de El Mirador, en el municipio de Coxcatlán. Tuvo que caminar casi una hora hasta la casa de Silvia, la mujer a la que violó nueve años atrás y a quien dejó embarazada, prohibiéndole casarse y advirtiéndole que si salía con alguien, la mataría.
Cuando llegó a su casa, ella cenaba con su familia, y Adán, en un arranque de furia, les disparó a todos: a Silvia, a su pareja Israel, a su hermana Belén —quien estaba embarazada— y sus padres Baltazar Sánchez e Isabel Hernández, quienes perecieron por las balas. Después, fue a casa del primo de Silvia y mató a todos. En total, 11 miembros de una familia en la que se incluían dos menores.
La noticia ha sido uno de los asesinatos más estremecedores de Puebla, e incluso, fue seguida por medios internacionales y bautizada como la masacre de Coxcatlán
Feminicidios de Mara y la pequeña Mayra de 9 años (2017 y 2020)
Puebla es una de las entidades con más feminicidios en el país; en 2020 se reportaron más de 30 mujeres asesinadas; sin embargo, uno de los casos que más estremeció la entidad fue el de Isabel, de 40 años, y Mayra, de 9, madre e hija, que fueron asesinadas en el municipio de Chietla, que, incluso, fue blindado por las fuerzas estatales después del crimen. Sus cuerpos fueron encontrados con huellas de tortura, violación y disparos de arma de fuego. Hasta el momento, no hay detenidos por el caso.
#JusticiaparaMara
El feminicidio de Mara Fernanda Castilla Miranda, en Puebla, causó indignación a nivel nacional; de acuerdo con las diligencias, fue asesinada después de abordar un taxi por aplicación en la capital de Puebla. Las autoridades detuvieron al chofer, a quien acusan del homicidio.
En redes sociales, fueron tendencia nacional los hashtags #JusticiaparaMara y #NoFueTuCulpa, mientras que colectivos feministas y mujeres en Puebla tomaron las calles en protesta por el feminicidio de Mara. Éste fue, quizá, uno de los feminicidios que más impacto tuvo a nivel nacional.
La “mataperros” de San Sebastián (2019)
En este caso, las víctimas fueron casi medio centenar de mascotas que una mujer robaba a los vecinos para guardar sus restos en su refrigerador y comerlos.
Asociaciones defensoras de animales denunciaron un macabro caso de maltrato animal en Puebla, luego de que vecinos entraran a la casa de una mujer ubicada en la calle 1-B, en Bosques de San Sebastián, en Puebla, y descubrieran que guardaba restos de perros, que robaba a los vecinos y recogía de la calle, ¡en el refrigerador!
En los últimos 10 años, estos asesinatos sacudieron no sólo a toda la sociedad poblana; sino que estremecieron a nivel nacional por la saña y crueldad con que fueron ejecutados.
