La activista y defensora de derechos humanos, Claudia Uruchurtu Cruz, fue asesinada, confirmó públicamente el fiscal general del estado de Oaxaca, Arturo Peimbert Calvo, este martes.
El fiscal indicó que Claudia, víctima de desaparición forzada desde el día 29 de marzo, fue asesinada y sólo se está a la búsqueda de encontrar su cuerpo para cerrar la investigación, información de la que tienen conocimiento sus familiares.
“Continúa el proceso de investigación para dar con el cuerpo de Claudia Uruchurtu. Ella ya no se encuentra con vida y lo que necesitamos para poder cerrar el ciclo completo es poder encontrar el cuerpo. Para eso estamos trabajando de manera estrecha y cercana con la Comisión Nacional de Búsqueda”.
Arturo Peimbert Calvo, fiscal de Oaxaca.
El funcionario comentó que gracias a los datos de pruebas que se han podido recabar en el caso de la activista mexico-inglesa, se ha podido determinar que fue asesinada por sus secuestradores con la complicidad de quien entonces era presidenta municipal de Asunción Nochixtlán, Lizbeth Victoria Huerta.
“Detectamos a través de las testimoniales a las que hemos tenido acceso, que han sido corroboradas y confirmadas por datos de prueba sólidos y científicos, que Claudia Uruchurtu fue ejecutada…”.
Arturo Peimbert Calvo, fiscal de Oaxaca.
El fiscal de Oaxaca dijo que se mantiene una estrecha colaboración con instancias federales y estatales. Este lunes la búsqueda del cuerpo de la activista se extendió por otras zonas de Nochixtlán con personal de la Comisión Nacional de Búsqueda, de la Secretaría de Gobernación (SEGOB).
Detenidos, prácticamente todos los involucrados
Peimbert Calvo agregó que se tienen detenidos prácticamente a todos los autores intelectuales y materiales de la desaparición y asesinato de la activista.
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Oaxaca obtuvo el auto de vinculación a proceso contra la edil morenista de Nochixtlán, Lizbeth Victoria Huerta, y otros integrantes de su cabildo, como probables responsables del delito de desaparición de personas, cometidos en agravio de la activista, quien había denunciado actos de corrupción y desvío de recursos oficiales.
“Ya está terminado ese trabajo y ahora corresponde a los jueces la responsabilidad de juzgar sobre este tema que ha lesionado tanto a la sociedad y al país, porque ha tenido repercusiones internacionales”.
Arturo Peimbert Calvo, fiscal de Oaxaca.