Paracaidistas de diversos estados de la República Mexicana y de otros países saltaron a 13 mil pies de altura y abrieron su paracaídas un kilómetro y medio antes de acuatizar en el lago de Tequesquitengo, en el municipio de Jojutla, en el estado de Morelos.
“Nos tiraron a 13 mil pies sobre el nivel de tierra, que vienen siendo unos 16 mil 500 metros sobre el nivel del mar, como 4 mil 500 metros, aproximadamente. Como todo deporte extremo es peligroso, pero nosotros lo practicamos con mucha seguridad”
Se trata de la tercera edición del Level Up to Sky, evento que cada año reúne a poco más de 30 paracaidistas internacionales y nacionales, certificados para ejecutar un salto único en el mundo.
“Superriquísimo y aterrizar en el lago está increíble y aparte que te reciban con tanto público está impresionante”.
“Desde que lo probé es una adicción, ya no puedes dejar de aventarte. La primera vez, con miedo, dices: ‘¿Qué estoy haciendo aquí? Me puedo matar, me puedo romper una pierna, un brazo’, pero ya conforme le vas agarrando y vas aventándote más, más y más, vas perdiendo el miedo y se vuelve algo adictivo”.
Un evento de talla internacional con los mejores paracaidistas
Se trata de una exhibición de talla internacional en uno de los principales destinos turísticos de la República Mexicana, mismo que busca destacar las habilidades de aquellos que, en el aire, dicen olvidar su estrés y preocupaciones.
“Creo que es muy bueno siendo México potencia en turismo, creo que ayuda mucho también para dar visibilidad internacional, aquí es una zona donde vienen muchos saltadores de otras partes del mundo y entonces estoy muy contento con eso, porque México es uno de los pocos países que tiene tan bonitos paisajes como éste. Hay gente de Paraguay, gente europea, polaca, también gente asiática; es muy divertido”.
“Vienen de Holanda, de Argentina, Uruguay, Paraguay, italianos y mexicanos, somos la gran mayoría de toda la República Mexicana, no solamente Morelos, no sólo Ciudad de México; hay desde Monterrey hasta Chiapas, y del mundo hay de todos lados”.
Las dificultades de saltar al agua
Un salto que, aseguran, implica un mayor reto en comparación a un aterrizaje en suelo firme, ya que en este evento ninguno de los 32 participantes utiliza equipo técnico y a una velocidad por arriba de los 200 kilómetros por hora, en equipos de cinco personas, realizan diversas formaciones en el aire.
“Me aventé con otros cuatro chavos y, bueno, hicimos una formación de cuatro personas, entonces vamos avanzando… Seguimos cayendo, hicimos algunas figuras y luego ya nos soltamos. Nunca me había tocado saltar hacia el lago y realmente es diferente a saltar en tierra porque, de entrada, no traes altímetro y, por ejemplo, traes un casco siempre que saltas en tierra y aquí es muy diferente la experiencia”.
“Es mucho más difícil en tierra porque aquí en el agua caes y no te pasa nada, por así decirlo, debes de frenar bien al momento de entrar en el agua; en el piso, si no frenas bien, puedes romperte una pierna, una mano o un tobillo. He saltado en Puerto Escondido, en Cancún, en Baja California; la verdad, en ningún evento caes en el agua, es un nivel único a nivel mundial”.
En el agua, lanchas y motocicletas acuáticas se mantienen alerta de la ubicación de cada caída para inmediatamente asistir a los deportistas, quienes minutos más tarde son trasladados a la orilla, donde en un exclusivo club social les esperan amigos y familia.
Al finalizar la exhibición, los participantes se reúnen para celebrar un salto más que esperan repetir entre los meses de septiembre y octubre del próximo año, con la participación de nuevos paracaidistas.