Técnicamente, bajo los árboles es como los alumnos de la Primaria Emiliano Zapata en el municipio de Lázaro Cárdenas, Michoacán, reciben clases, luego de que el sismo del pasado 19 de septiembre dañara su escuela.
Construida en 1978, la escuela ubicada en la tenencia de Buenos Aires alberga a 300 niños, quienes entre grietas y desprendimiento de concreto en paredes, deben continuar con sus actividades escolares.
Nuestros salones ya estaban con algunas grietas; estamos en una zona donde llueve, hay huracanes y ya estaban sensibles y ahora, debido al sismo del 19, este fenómeno nos vino a afectar más los salones
Edith Esquivel Reyes, directora Primaria Emiliano Zapata
Deben refugiarse en tiempos de lluvia en la dirección, donde por su reducido espacio, algunos deben permanecer afuera.
Ahorita estamos de manera provisional con el maestro afuera, pero a veces cuando llueve corren y piden auxilio a la dirección, pero no caben los niños.
Edith Esquivel Reyes, directora Primaria Emiliano Zapata
Uno de los grupos que reciben clases bajo los árboles es el de sexto grado, el cual está a cargo de la maestra Diana Luna Vargas.
Tras el sismo, recuerda, que acudió Protección Civil y la Secretaría de Obras Públicas Municipales, quienes diagnosticaron que el salón no era apto para recibir niños.
Ahorita tenemos buen tiempo, hay sombra, pero los días anteriores sí estaba el sol y nos tenemos que mover de un lugar a otro
Diana Luna Vargas, maestra de Primaria Emiliano Zapata
Por su parte, los propios padres de familia se han dado a la tarea de retirar el escombro de los salones y organizarse para recaudar fondos y reconstruir la escuela.
Pues ahorita se tiene organizado hacer una kermés para conseguir algo de apoyo para empezar a tratar de arreglar el aula, pero se ocupan demasiadas cosas
María del Carmen Duran e Itzel Tapia
Aseguran que estudiar a la intemperie afecta a los niños, pues además de los distractores, los menores están expuestos a diversos peligros.
