La noche violenta del 9 y madrugada del 10 de agosto, fueron desmenuzadas finalmente por la Fiscalía General de Jalisco.
En total, fueron 14 puntos en los que, esa noche de terror, se registraron bloqueos y quema de automóviles.
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Ocho de los puntos de ataque están ubicados en la zona metropolitana de Guadalajara y el resto tuvieron lugar en Ixtlahuacán del Río.
El objetivo fue impedir que llegara apoyo policíaco a Ixtlahuacán.
“La finalidad y como se ha mencionado anteriormente era, primero, evitar el traslado del apoyo, así como causar distintas distracciones que pudieran ser atendidas por el personal operativo y de esa manera mantener ocupado al personal y evitar que se brindara el apoyo al equipo vecino”.
Ricardo Sánchez Berumen, gabinete de seguridad de Jalisco.
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El saldo total de estos hechos es de 3 personas sin vida, una de las cuales portaba un chaleco táctico con siglas de un grupo delictivo, 19 vehículos calcinados, entre la zona metropolitana e Ixtlauacán, y un negocio incendiado.
Los operativos de vigilancia en ambas zonas continúan, informaron las autoridades.
