Un hombre fue detenido por incendiar una tortillería en el municipio de Zihuatanejo, según informó este martes la Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero.
En redes sociales se viralizó el video del momento en el que el sujeto arrojó una bomba molotov. En la grabación de cámaras de seguridad se observa que el hombre llegó al mostrador del establecimiento y dejó una moneda. Pero mientras la encargada empacaba las tortillas, el hombre irrumpió en el sitio.
El sujeto sacó de su mochila una bomba molotov, le prendió fuego y la arrojó junto a la máquina en la que se preparaban las tortillas. Al ver el fuego, la encargada del lugar corrió hacia la calle y el agresor también huyó.
Mientras el fuego y el humo se expandían por la tortillería en Zihuatanejo, la trabajadora regresó para tomar un objeto del mostrador y se alejó nuevamente.
El ataque se registró en el establecimiento el pasado 10 de noviembre, según confirmaron las autoridades de Guerrero.
Luego de que el video se volvió viral en redes sociales, Irvin Jiménez Sánchez, subsecretario de Prevención y Operación Policial del estado, confirmó que el presunto agresor fue arrestado. Sin embargo, no reveló las causas del ataque.
El funcionario detalló que después del incendio se desplegó un operativo por parte de policías municipales y estatales, en coordinación con elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, de la Secretaría de Marina, de la Guardia Nacional y de la Fiscalía General de Guerrero.
“Pocas horas después fue localizada una persona que reunía las características, incluso traía la misma vestimenta”, indicó Jiménez Sánchez en conferencia de prensa. Agregó que el sujeto fue revisado y fue arrestado por narcomenudeo y por su presunta responsabilidad en el atentado contra la tortillería.
Denuncian extorsiones contra tortillerías de Guerrero
De acuerdo con reportes locales, dueños de tortillerías en Zihuatanejo han sido extorsionados por la delincuencia organizada, con mensajes intimidantes que dejan en sus establecimientos.
Según denuncian, a los propietarios se les exige una cuota semanal de hasta 2 mil pesos para evitar agresiones.