¿Un atentado contra el amor? Cierran el famoso “balcón de Ana” en el Callejón del Beso, en Guanajuato

Callejón del Beso en Guanajuato: cierran balcón de Ana por primera vez en 27 años
Por primera vez en 27 años, este ícono del turismo en la capital de Guanajuato fue cerrado al público. Foto: Cuartoscuro/Facebook/Callejón del Beso – Oficial

El Callejón del Beso en Guanajuato es el escenario de un desacuerdo en uno de los puntos turísticos más importantes de la capital del estado, debido a que este fin de semana el famoso “balcón de Ana” fue cerrado por primera vez en 27 años.

El cierre del paso a los turistas a este sitio característico es debido al presunto acoso de fotógrafos en este punto de la ciudad, quienes “se consideran exclusivos” y le impiden a la dueña del inmueble, donde está el balcón, llevar a cabo su trabajo, a pesar de que se trata de un negocio formal.

¿Qué se sabe del cierre del “balcón de Ana” en el Callejón del Beso, en Guanajuato?

Desde la noche de este sábado, el acceso al icónico “balcón de Ana” fue cerrado a los turistas y, a manera de protesta, una enorme manta negra con rojo cubre el sitio al que miles de parejas suelen acudir y tomarse la fotografía dándose un beso.

Norma Luz Gámez Moncada, quien es la propietaria del inmueble donde se encuentra el balcón, hizo esto debido al supuesto acoso de los fotógrafos de la zona. Aseveró que las autoridades no han actuado ante sus peticiones para tomar cartas en el asunto, y que los fotógrafos han causado al personal, en especial a mujeres, estragos físicos y mentales.

De la misma manera, la mujer denunció que existe desventaja económica para sus productos, así como hostigamiento al turista por parte de los fotógrafos, quienes se consideran exclusivos en este punto del Callejón del Beso, lo que genera enojos y conflictos con los visitantes de la ciudad de Guanajuato.

¿Qué dicen los fotógrafos del cierre del “balcón de Ana” y las acusaciones de la dueña?

Por su parte, los fotógrafos rechazaron las acusaciones de Norma Luz Gámez Moncada. Resaltaron que en realidad se trata de un conflicto sobre la captura de fotografías en el Callejón del Beso y el dinero que se obtiene por dicha actividad.

Mientras tanto, durante este fin de semana, las distintas parejas de turistas que acudieron para llevarse la clásica fotografía, en la que uno de ellos debe estar en el “balcón de Ana” y el otro en el “balcón de Don Carlos”, se quedaron con las ganas.

¿Cuál es la leyenda del Callejón del Beso y por qué se toman fotos en este lugar de Guanajuato?

Ana era hija de un español controlador, que estaba en vísperas de casarse con un rico de la región. Un día, paseando por las calles de Guanajuato, conoció a Carlos, un minero de bajos recursos.

En contra de su padre, Ana se reunía todos los días con Carlos, en secreto. Hasta que el rumor de sus encuentros llegó a oídos de su padre. A manera de castigo, Ana fue encerrada en su habitación. Ante su ausencia, el enamorado fue a buscar la casa de la mujer, ubicada en un estrecho callejón, sobre el cerro del Gallo.

Carlos notó que la ventana del cuarto quedaba a muy corta distancia del balcón vecino. Así que no dudó en visitar al dueño de la casa y pedir que le fuera vendida, aunque eso significaba invertir todos sus ahorros. Tras recibir la negativa por parte del dueño ante la opción de compra, acordaron que le sería rentada.

Luego de esto, todas las noches Carlos y Ana se veían de balcón a balcón, para fundirse en apasionados besos. Sin embargo, el encanto terminó cuando el padre de ella entró y descubrió uno de sus encuentros. Esto generó que el hombre tomará una daga para atravesar el corazón de su hija.

La leyenda dice que Carlos intentó saltar de la ventana hacia la habitación, para salvar a Ana, pero se estrelló contra el suelo y murió en el tercer escalón. Otro posible final es que, acongojado por el dolor de la muerte de su novia, el minero se suicidó en su lugar de trabajo, la mina de La Valenciana.

Por esta razón, la tradición del Callejón del Beso señala que todas las parejas que visiten este sitio, deberán besarse en el tercer escalón, pintado de rojo, para disfrutar de siete años de felicidad, o de lo contrario, tendrán una vida de mala suerte, que se extenderá por el mismo tiempo que dicta la tradición.

Qué opinas