En un operativo nocturno, las autoridades municipales de Texcoco, en el Estado de México (Edomex), desmantelaron una presunta red de tráfico de personas en la comunidad de Montecillos, conocida también como el “Huizachal”. Al rededor de 119 migrantes, entre ellos niños, fueron rescatados en condiciones inhumanas.
Además, cuatro presuntos “polleros” fueron arrestados.
[Elecciones 2024: Sigue aquí los pasos de los candidatos a la Presidencia]
Rescatan a 119 migrantes en condiciones inhumanas
Vecinos alertaron a la policía sobre disparos y la presencia de individuos sospechosos; por lo que disidieron llamaron las autoridades para inspeccionar la zona.
Al llegar al lugar, los agentes observaron a dos individuos. Un hombre y una mujer, que huían hacia un autobús negro con decoraciones de dragones azules y blancos. Los presuntos sospechosos buscaron ocultarse en el vehículo.
Tras una breve persecución, se descubrió que más de cien personas, entre ellas 59 hombres, 47 mujeres y 14 menores de edad, estaban retenidas en contra de su voluntad en un salón de fiestas.
Los rescatados, de nacionalidades venezolana, dominicana y ecuatoriana, relataron condiciones inhumanas: falta de alimentos, encierro y maltrato.
[TE PUEDE INTERESAR:Estaban abandonados: rescatan a más de 100 migrantes guatemaltecos en Sonora]
Cuatro “polleros” capturados en Texcoco
La intervención policial condujo al rescate de los migrantes y a la detención de los presuntos traficantes de personas. Se capturaron cuatro individuos cuando intentaban escapar en un autobús y un automóvil rojo.
Juan Ángel “N”, Héctor “N”, Jahir de Jesús “N” y Laura “N”, junto con las unidades de trasporte, quedaron a disposición de la FGR para revisar su situación legal y completar la investigación.
Además, en el lugar, se encontraron evidencias de violencia, las cuales incluyen un vehículo con impactos de bala y casquillos en el lugar.
Brindan ayuda humanitaria para migrantes
Las autoridades municipales, en coordinación con diversas instituciones, brindaron asistencia humanitaria a los rescatados, asegurándose de respetar sus derechos fundamentales.
El Gobierno Municipal proporcionó alimentos, atención médica y acompañamiento, mientras que el Instituto Nacional de Migración (INM) se encargó de trasladarlos a un sitio seguro durante su estancia en el país.
Hasta el momento, las autoridades locales continúan investigando este caso para llevar ante la justicia a los responsables y prevenir futuros actos de tráfico y abuso contra los migrantes.