Entre aplausos y oraciones, despiden a Toñito en Tenango del Valle
En un ambiente de dolor e indignación, familiares, amigos y vecinos de Toñito, el niño de nueve años hallado sin vida en Tenango del Valle, Estado de México, le dieron el último adiós.
El cuerpo del menor fue velado en su casa, donde entre aplausos, sollozos y oraciones, su familia y comunidad se reunieron para despedirlo. Afuera, decenas de personas sostenían flores blancas y globos azules y blancos, símbolos de solidaridad y exigencia de justicia.
“La tristeza sigue en mí”, dice su abuela
Martha Pedraza, abuela de Toñito, expresó su dolor por la pérdida del menor:
“La tristeza sigue en mí, es un dolor muy grande que no asimilo”, señaló entre lágrimas.
Desde el lugar del velorio, la comunidad reiteró su llamado a la justicia y a la protección de los menores.
“La unión hace la fuerza, y ellos piden lo mismo que yo: justicia. No quiero que esto se repita con otros niños”, añadió la abuela.
Homenaje en su escuela y cortejo fúnebre
Horas después, el cuerpo de Toñito fue llevado a la escuela primaria donde estudiaba. Sus compañeros lo despidieron con mensajes de justicia, aplausos y lágrimas.
Posteriormente, el cortejo fúnebre avanzó por las calles de Tenango del Valle, acompañado por vecinos y familiares en silencio. A su paso, la comunidad arrojaba flores blancas, mientras globos azules flotaban en el aire en señal de despedida.
Exigen justicia en el lugar donde fue hallado
En el sitio donde Toñito fue encontrado sin vida, aún permanecen los sellos de aseguramiento de la Fiscalía del Estado de México. A su alrededor, cartulinas con mensajes de indignación cubren las paredes, con frases como “Los niños no se tocan”.
Martha Pedraza narró lo que observó en el cuerpo de su nieto:
“Tenía golpes en la cara y creo que lo amarró. No sé si lo violó porque su pantaloncito estaba desabrochado”, declaró.
Detienen a un sospechoso; continúan las investigaciones
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) informó que fue detenido Mario “N”, de 30 años, como presunto responsable del caso.
El sujeto rentaba los videojuegos donde el menor fue visto por última vez. Las investigaciones continúan para esclarecer lo ocurrido y determinar su grado de responsabilidad.
