La flor de cempasúchil, que guio el camino de los muertos y decoró ofrendas, tiene un segundo uso: es empleada para crear insecticida y acabar con plagas domésticas, por lo que, desde el 2019, Alejandra y Ana las colectan durante el mes de noviembre en el municipio de Toluca, Estado de México.
“Inicia porque mi compañera es Anita y es agrónoma, y yo soy biotecnóloga, y pues juntamos estas dos carreras y pensamos en hacer un insecticida a base de flor de cempasúchil… Se necesita una gran cantidad de macetas porque lo que nosotros hacemos es secar la flor; entonces, cuando la flor está así normal pesa alrededor de 2-3 gramos, cuando se seca pesa .02 gramos y necesitamos alrededor de un kilo para hacer un litro de insecticida”.
Alejandra Gaitán, creadora de insecticida con flor de cempasúchil.
El proceso no es sencillo; se necesitan, al menos, tres meses: desde seleccionar la flor, el secado a la luz del sol y la maceración en agua con alcohol para obtener sus propiedades.
“El extracto lo que tiene es que el cempasúchil produce piretrina, que es lo que ayuda a eliminar este tipo de insectos… Se puede utilizar en hortalizas, en plantas de alimentos, también, por ejemplo, podemos poner en fresa, jitomate, plantas ornamentales, todo lo que tenga pulgón, mosca blanca y este año lo estuvimos probando en algodoncillo y también funciona”.
Alejandra Gaitán, creadora de insecticida con flor de cempasúchil.
No todas las flores de cempasúchil son aptas
De acuerdo con la emprendedora, reciben ramos o macetas que no hayan tenido contacto con el suelo; por ejemplo, las plantas que utilizan para hacer figuras en las ofrendas no se pueden recibir, para evitar contaminación en el insecticida.
La iniciativa ha tenido respuesta favorable por parte de los mexiquenses, quienes acuden a dejar sus macetas y comprar insecticida.
“Creo que está fantástico porque, aparte de que es orgánico, estás ocupando algo que difícilmente sabíamos qué hacerle después de tenerlo como adorno, podría decirse, entonces a mí sí me gustó la idea… Me ha ayudado bastante con las plagas y de alguna u otra manera también huele rico, entonces está chido, a mí me gusta”.
Andrea Miranda, donadora de macetas.
Cuando comenzó el proyecto lograron juntar 800 macetas de flor de cempasúchil, el año pasado 3 mil y para este año esperan más de 5 mil. Si deseas sumarte y donar, puedes hacerlo a través de la página de Facebook, Plantarium Toluca.
“Pues se lo pongo a mis plantas, normalmente; sólo la he usado una vez y creo que no me ha dado problemas de plaga en las plantas de la cafetería, porque tenemos muchas plantas en la terraza y pues por eso me vengo a surtir otra vez”.
María Fernanda Varela, donadora de macetas.
