Este 2 de febrero, Día de la Candelaria, los comerciantes que se instalan en el estacionamiento del Parque Colosio en Toluca, Estado de México, reparan y visten niños Dios por esta temporada; esperan tener buenas ventas y recuperar ganancias después de un año en el que no pudieron vender tan bien, debido a la pandemia por COVID-19.
En México, a quien le haya tocado un Niño Dios al partir la rosca de Reyes, debe invitar los tamales el 2 de febrero, Día de la Candelaria, donde se celebra la purificación de la Virgen María, fecha en la cual se acostumbra llevar vestidos a los niños Dios que estuvieron en los nacimientos en diciembre.
¿Por qué son vestidos los niños Dios?
Los niños Dios son vestidos especialmente para este festejo donde serán presentados en la iglesia, por ello, existen personas especializadas, como los comerciantes del Parque Colosio, en Toluca, que se encargan de engalanar las vestimentas de niños Dios de todos los tamaños y colores, además de repararlos si es necesario.
Las imágenes de todos los tamaños, grandes y diminutas, son resanadas si se encuentran despostilladas; pegadas en caso de haber perdido alguna extremidad y pintadas de nuevo para quedar como nuevas para esta festividad.
Los trajes de los niños Dios han ido variando de acuerdo con la época y ya no sólo se les viste con trajes típicos como el del Santo Niño de Atocha, sino también con vestimentas que hacen alusión, por ejemplo, a médicos y enfermeras para dar gracias por la salud ante la pandemia de COVID-19.
¿Qué se festeja el Día de la Candelaria?
En la religión católica, se celebra la purificación de la Virgen María tras el nacimiento del Niño Dios, ritual en el que la madre de Jesucristo lo llevó a la iglesia 40 días después del parto, lo que se conmemora el 2 de febrero.
La fiesta del Día de la Candelaria es muestra del sincretismo que existe en México, donde se celebran eventos como éste que conjugan las raíces indígenas de los ancestros mexicanos y de la religión católica.