La Coordinación Nacional de Protección Civil reconoció el viernes 12 de agosto que no se han logrado avances en la extracción de escombros para ingresar a las galerías del pozo de la mina del predio del Pinabete, en Sabinas, Coahuila, para tratar de rescatar a los 10 mineros atrapados.
“No se ha avanzado nada; solamente hemos bajado, aproximadamente, 60 metros que tiene de profundidad el pozo. Se va a intentar entrar a las galeras. Tenemos esperanza y adentro hay condiciones para encontrar recovecos”.
Laura Velázquez, titular de Protección Civil.
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Los escombros se tienen que extraer de una profundidad de 60 metros, por el diámetro del pozo, no mayor al de un tambo de 200 litros, por lo que las labores se complican.
Durante el viernes se realizaron descensos de personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para realizar y supervisar estos trabajos.
Además, se retiró malla de alambre soldada, polines de madera y 60 metros de manguera, con el objetivo de continuar con el bombeo de agua.
De acuerdo con las autoridades, una vez que esté despejado este punto, entre el subsuelo del pozo y las entradas a las galeras, una cuadrilla de la Sedena y voluntarios estarían en posibilidad de ingresar a la mina.
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Gas se suma como factor de retraso
Además de los escombros, este viernes el gas se sumó como un factor de retraso a las labores de rescate.
Autoridades determinaron realizar mediciones de niveles de gas cada media hora, por seguridad de los rescatistas.
- Aunado a lo anterior, una intensa lluvia se registró en la zona, lo que obligó a la suspensión, de manera momentánea, de las labores de rescate.
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Familiares de los mineros atrapados continúan realizando vigilias y caminatas para pedir el pronto rescate de los trabajadores.
Este fin de semana, se realizó una misa en el domicilio de uno de los mineros atrapados, mientras la incertidumbre y la desesperanza priva entre los familiares a nueve días del accidente.