Cuatro incendios forestales activos, dos de ellos fuera de control, devastan tres municipios de la región sureste del estado de Coahuila.
Rachas de viento de hasta 70 kilómetros por hora y condiciones muy secas en el ambiente arrebataron desde ayer el control de dos de los incendios forestales a brigadistas, bomberos y personal federal de la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Nacional.
En Arteaga, en los límites con el estado de Nuevo León, el viento obligó a reducir el combate aéreo.
- De 97 descargas de agua con retardante que los cuatro helicópteros realizaban, sólo pudieron hacer 44
El campamento forestal en Coahuila, que alberga a autoridades y combatientes, tuvo que ser reubicado de emergencia ante el peligro de ser alcanzado por las llamas que se avivaron en cuestión de segundos.
Autoridades federales y del estado de Coahuila mantiene el dato de control en un 40% de ese incendio y sofocado el 15%, pero el avance del fuego se mantiene fuera de control.
En Saltillo, en la Sierra de Zapalinamé, van más de 300 hectáreas de pastizal, matorral y arbolado joven consumidos por el fuego.
- Las llamas fueron visibles a kilómetros durante la noche del lunes
El incendio de Arteaga, en el entronque al ejido San Antonio de las Alazanas y del municipio de Ramos Arizpe, a la altura de la presa “Palo Blanco”, fue controlado desde ayer y se encuentran bajo monitoreo para evitar que resurjan ante las condiciones climáticas que imperan en la región.
Cabe resaltar que un bombero resultó lesionado y hospitalizado luego de ser atropellado por el camión cisterna del mismo cuerpo de rescate.
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