En esta calle emblemática del Centro Histórico de la Ciudad de México el número de personas con cubrebocas es mayor a quienes no lo usan, saben que reduce hasta en un 90 % el riesgo de contagiarse de COVID-19.
Sin embargo, esta efectividad se incrementa a más del 95 % cuando se usa doble cubrebocas.
“Yo creo que hay que pensar en el doble cubrebocas como una de las maneras más útiles que tenemos para evitar el contagio, incluso cuando la gente ya está vacunada”.
Antonio Lazcano, comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia Coronavirus.
Para obtener 95 % de protección, recomiendan utilizar dos cubrebocas quirúrgicos de triple capa, o en su defecto uno quirúrgico y por encima de este, uno de tela.
“Uno de estos azulitos, que se compran muy fácilmente, se coloca bien y el punto es que el cubrebocas tiene arriba una especie de alambrito que permite ajustar muy bien sobre la nariz, es importante que el cubrebocas llegue abajo del mentón, y encima me pongo un cubrebocas tradicional KN95, y doblo así el elástico, lo hago girar para que apriete mejor y de nueva cuenta hago la maniobra de ajustar sobre la nariz”.
Antonio Lazcano, comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia Coronavirus.
La recomendación de usar doble cubrebocas se debe a la aparición de nuevas variantes del virus.
“Han aparecido variantes del virus que son más contagiosas, no se trata de vivir con paranoia, pero sí tener todas las precauciones para evitar contagiarse”.
Antonio Lazcano, comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia Coronavirus.
El científico de la UNAM ejemplifica la importancia de adoptar el doble cubrebocas en la vida cotidiana.
“Es como caminar a pie en el carril de alta velocidad en el Periférico, sin cubrebocas. Estar con un cubrebocas es como caminar en esa banquetita que está a la orilla del Periférico. Estar con doble cubrebocas es estar sobre la banqueta en una calle de poco tránsito”.
Antonio Lazcano, comisión Universitaria para la Atención de la Emergencia Coronavirus.