Samuel es un pequeño de 12 años que no puede hablar, pero con sus manos demostró la emoción que le provocó convivir con policías de la Ciudad de México (CDMX)
El lunes 18 de abril, agentes de la unidad 508 vieron que el niño los llamaba agitando las manos al aire.
Los uniformados de la Policía Auxiliar estaban asignados a la vigilancia de la Colonia Nueva Vallejo, en la alcaldía Gustavo A. Madero, y no dudaron en acercarse con la madre del menor para entrevistarse con ella.
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“Nos dice la mamá que el niño no puede hablar, pero que a él le gustaría ser policía. Lo dejamos interactuar con nosotros, lo subimos (a la patrulla), le ponemos su cinturón de seguridad y lo llevamos a dar una vuelta con nosotros”.
Diego Hernández, policía auxiliar de la CDMX.
La policía Silvia Hernández comentó que solicitaron permiso a sus mandos para brindarle un paseo a Samuel por un par de cuadras y también para que accionara la sirena y torreta de la patrulla.
“Informamos a nuestros mandos y ellos nos dan la autorización de hacer la acción. Posteriormente, cuando se termina esa acción, nosotros hacemos una tarjeta informativa para, así mismo, informar lo sucedido de todo el hecho”.
Silvia Hernández, policía auxiliar de la CDMX.
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Al final del viaje en la patrulla, Samuel dio las gracias y les hizo saber, a través de su mamá, que quería seguir el ejemplo de buenos policías.
Por su parte, a los oficiales esta acción los motivó a seguir trabajando en favor de los habitantes de la Ciudad de México.
“Eso es parte de nuestras funciones también, el acercamiento con cada uno de los ciudadanos, que se sientan protegidos, esa es nuestra función primordial y estamos orgullosos de que los niños sigan confiando en nosotros”.
Diego Hernández, policía auxiliar de la CDMX.
