Los scooters o mopeds son vehículos con sistemas motores eléctricos semiasistidos que cada día son más utilizados como transporte en la Ciudad de México (CDMX).
Guillermo Ávila Reséndiz, director general de Seguridad Vial, de la Secretaría de Movilidad, explica que a pesar de que actualmente no es requisito emplacarlos o portar tarjeta de circulación, sus usuarios deben respetar las normas viales.
“Que las personas sepan que ese tipo de vehículos no pueden circular en las banquetas y tienen que hacerlo a una velocidad adecuada”, destaca el funcionario.
Las autoridades explican que la velocidad máxima para circular en las ciclovías en este tipo de vehículos es de 25 kilómetros por hora. Si rebasan ese límite deben circular con motos y automóviles.
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José Carlos Ramírez, usuario de este tipo de transporte, utiliza casco, chaleco reflejante y extrema precauciones para evitar accidentes al circular entre los automóviles.
“Regularmente, es un vehículo que ya encarrerado alcanza una velocidad de 50 kilómetros más o menos, ya encarrerado, pero yo procuro andar a una velocidad moderada con todas las precauciones entre calles… Ya me tocó una vez que me dieron un ‘lleguesito'”.
José Carlos Ramírez
En el Reglamento de Tránsito estos vehículos son considerados como motorizados y por tal motivo los infractores pueden recibir una amonestación o sanción, advierte Guillermo Ávila Reséndiz.
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“El acercamiento primero es de orientación y por eso también es importante que las personas conozcan cuáles son las reglas que deben de seguir, pero por supuesto, si amerita una sanción, la Policía de Tránsito lo tendría que hacer”, destaca la autoridad.
- El Reglamento de Tránsito, en su fracción XLVIII del artículo 2, señala que se considera un vehículo motorizado a aquellos vehículos de transporte terrestre de pasajeros o carga, que para su tracción dependan de un motor de combustión interna, eléctrica o de cualquier otra tecnología que les proporcione velocidad a más de 25 km/hr.
Este tipo de vehículos se han convertido en una alternativa para ahorrar combustible, tiempos de traslados y estacionamiento para usuarios como Gonzalo, quien asegura que desde que sale de su casa a su destino ahorra tiempo, a comparación de si fuera en automóvil, además de que no contamina.
