Su preparación requiere todo el amor. Primero se amasa, luego se pone el queso y poco a poco toma forma y nos da una pista. En el aceite, arde la pasión y está lista la ¡Gordilove!
Una gordita que, por su peculiar forma de corazón, es la sensación en la colonia Nueva Santa María, al norte de la Ciudad de México.
Al ponerle crema, queso y salsa se vuelve un manjar para el paladar y un apapacho para el alma.
“¡No bueno, riquísima! sabes, es que la masa es de una preparación especial
Aída Montes, comensal
Los integrantes de la familia Martínez, son los responsables de esta creación.
Hace cuatro años que la sacamos, la sacamos en masa normal y se nos ocurrió hacerla en masa de color y eso es lo que ha pegado, que tenemos las combinaciones de cada una. Siempre lo compartimos en familia, todo lo hemos hecho en familia.
Mary Romero, Creadora de la Gordilove
Aunque estas garnachitas del amor son una exquisitez urbana, Doña Mary guarda el secreto de cómo logra el color rojo de las gorditas.
Es crujiente y pica un poquito, gracias a la receta de la familia, que no se dice porque es secreto, tiene un sabor diferente
Mary Romero, Creadora de la Gordilove
Las Gordiloves pueden ser de chicharrón con queso, queso, chicharrón o con guisados, al gusto del cliente con el ingrediente principal.
“Se hacen con amor, más que nada le gusta a la gente el sabor y estar innovando.”
Lupita Martínez, creadora de la “Gordilover”
Los Martínez recomiendan disfrutar este platillo acompañado del amor o una amistad, como el señor Carlos, que se adelantó a la celebración de San Valentín e invitó a su esposa.
“Venimos a comer unas “Gordilove”, para disfrutarlo”.
Carlos Martínez, comensal
Recuerde, que el amor siempre entra por el estómago y que mejor que disfrutar este 14 de febrero, aquí en el “Rinconcito Mexicano” con una Gordilove.”