Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) desmantelaron el último aserradero clandestino que talamontes mantenían activo en el Ajusco, al sur de la Ciudad de México. La ruta económica de la madera ilegal va a parar a carpinterías en banquetas y camellones, donde exhiben roperos, camas, cajoneras, sillas y bancos.
Los responsables huyeron del sitio asegurado, que se encuentra en avenida Cedros, colonia Ampliación San Miguel Ajusco, alcaldía Tlalpan, pero dejaron la herramienta y casi una tonelada de madera ya procesada. En las inmediaciones, por temor, los vecinos dijeron no saber nada sobre este delito ambiental, pero algunos mencionaron que es usada para elaborar muebles en plena vía pública.
Testigos señalaron que estas madererías, que están de manera clandestina sobre las calles, no tienen la manera de justificar de dónde obtienen la madera legalmente. En Tlalpan, los talamontes también venden a madererías, a menos del 50% de su precio real.
“Éste y otro punto más, fueron los últimos dos ubicados como aserraderos; sin embargo, se continúan haciendo trabajos de inteligencia, con el fin de identificar más aserraderos en la zona. Aquí todos somos vecinos, aquí tenemos años viviendo, pero que se escuche así ruido, no”, indicaron.
¿Cuántos aserraderos clandestinos han sido desmantelados?
Del 2022 a la fecha, en coordinación con la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural, así como el Ejército y la Guardia Nacional, se desmantelaron 18 aserraderos ilegales en el Ajusco.
Por ejemplo, precisaron que un polín de pino que cuesta 150 pesos en el mercado negro pueden venderlo en 40 pesos. En esos comercios tiene puesta la lupa la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
“Lo único que tenemos que ver es que tengan la autorización para el funcionamiento y que demuestren la legal procedencia de las materias primas y los productos como son tablas, polines o algún otro tipo”.
Secretaría de Seguridad Ciudadana
Los grupos delictivos que controlan la tala en la capital mexicana realizan trasiego de madera a estados cercanos. Algunas veces utilizan documentación, que expiden madererías formales para intentar engañar a la autoridad.
¿A dónde va la madera que cortan los talamontes?
“Y otras son llevadas al estado de Morelos, al Estado de México; de acuerdo a como es transformada, se lleva a veces en vehículos tapados totalmente. En algunos, con alguna documentación, para hacerla ver legal”, apuntaron elementos de la dependencia.
“Mire, una vez asegurado el inmueble, además se le colocan sellos por parte de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente”. Todo para impedir que los talamontes sigan lucrando con la devastación de los bosques.
Así te informamos en Unotv.com sobre la detención de la lideresa de los talamontes:
