La historia de “La casa del mestizo” comenzó hace 22 años junto a Silvia, quien ha convertido su hogar en un albergue de perros ubicado en la colonia Roma de la Ciudad de México (CDMX).
- La gran mayoría de los 120 perros que hoy se refugian aquí son negros y mestizos. Silvia señala que la gente que adopta evita ejemplares con estas características.
Para la fundadora de “La casa del mestizo” no es importante que la gente reconozca su labor, reitera que lo más importante es atender a los perros que rescata, pues muchos de ellos están en lamentables condiciones, como Güera, con quien comenzó todo.
Silvia rescató a Güera tras encontrarla atropellada en una avenida; vio como se arrastraba y nadie hacia nada por ayudarla.
Perros descansan en una de las literas del refugio. Foto: Cuartoscuro Los perros del refugio “La Casa del Mestizo” ocupan todos los espacios de la casa de Silvia García, quien tiene 22 años de rescatar a perros callejeros; muchos de ellos en pésimas condiciones. Foto: Cuartoscuro
Hoy a pesar del enorme reto físico y económico que implica la atención de “La casa del mestizo“, Silvia aún rescata perros, sobre todo en el municipio de Chimalhuacán, en el Estado de México (Edomex).
- En tono de broma, Silvia dice que cuando tiene que ir a Chimalhuacán “va con los ojos cerrados” para no regresar con decenas de perros callejeros.
En el último mes se redujo el número de habitantes en “La casa del mestizo“, ya que hace unas semanas varios perros fueron adoptados en Canadá, incluida su perrita.
Habitantes de la GAM e Iztapalapa no pueden adoptar en este albergue
Al preguntarle a Silvia sobre el proceso que deben seguir las personas que quieran adoptar un perro de “La casa del mestizo“, la fundadora dice que primero investiga de qué delegación viene el candidato a adoptar, ya que si vive en las alcaldías de Iztapalapa o Gustavo A. Madero, quedan descartados automáticamente.
Un perro negro y mestizo espera en la puerta para salir a tomar el sol en el refugio. Foto: Cuartoscuro Rodolfo es el perro alfa del refugio para perros “La Casa del Mestizo”, el perdió un pata por el cáncer. Foto: Cuartoscuro
- En estas demarcaciones hay un alto índice de abandono, por lo que les hace la observación de que sería más fácil adoptar uno de los cientos de caninos abandonados que rondan por sus colonias.
Cristian, uno de los tres jóvenes que ayudan en “La casa del mestizo“, cuenta que a diario se tiene que lavar los patios en donde toman el sol, tiempo que aprovechan para limpiar sus camas. Prácticamente todos los espacios de la casa están habitados por caninos.
Él dice que lo más complicado y caro es alimentarlos, por eso cuando alguien quiere hacer una donación siempre sugieren alimento o dinero en efectivo para comprarlo. Alguna vez se quedaron sin recursos para darles de comer.
Al finalizar la charla, Cristian muestra fotos de dos de los perros que se fueron a Canadá, mientras convive con decenas de peluditos que intentan lamerle la cara.