La Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México celebró el nacimiento de dos polluelos de cóndor de California en el Zoológico de Chapultepec, por lo que ya suman nueve ejemplares que forman parte de un programa para la preservación de la especie.
Los esfuerzos binacionales buscan recuperar, reintroducir y conservar al cóndor de California (Gymnogyps californianus), con la ayuda del Zoológico de Chapultepec. Las últimas dos crías nacieron el 15 de enero y el 12 de febrero, “y son atendidas y alimentadas por sus (respectivos) padres biológicos”.
“Los polluelos de cóndor de California pasan alrededor de cinco meses en sus nidos, dependen de alimentación y cuidados de sus padres, y durante este tiempo empluman. Luego dan sus primeros vuelos, aventurándose fuera del nido”.
Zoológico de Chapultepec y la preservación
- Cada cóndor de California es revisado periódicamente por veterinarios
- Revisan que estén recibiendo alimento y cuidados adecuados
Veterinarios del Zoológico de Chapultepec realizaron exitosamente el primer examen físico de las dos crías de cóndor de California, examinaron a padres y a hermanas nacidas en 2019, y que en su conjunto conforman la población que habita en ese recinto ecológico de la Ciudad de México.
“Asimismo se desparasitaron, recibieron su primera vacuna y se les colocó su microchip de identificación. Las dos crías se encuentran en excelente estado de salud y pesaron más de ocho kilogramos, peso que registran inclusive algunos de los adultos”.
Cóndor de California en CDMX
El programa de preservación del Zoológico de Chapultepec ha sido fundamental: la especia estuvo a punto de extinguirse en la década del 80, y entre “1930 y 1940 se registró el último avistamiento de cóndor de California en vida silvestre”. San Pedro Mártir, en Baja California, es el lugar donde se les reintroduce ya adultos.
Las tareas del Zoológico de Chapultepec han hecho que el cóndor de California pase de “Probablemente extinto en el medio silvestre” a “En peligro de extinción”, alejándose de la extinción total. Aunque queda mucho por hacer, los avances de preservación son significativos.
