El Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) y bomberos de la Ciudad de México entrenan en escombros con el objetivo de preparar a sus elementos para una emergencia real como un sismo.
Luis Ochoa Bravo es uno de los instructores que supervisa la capacitación en campo.
- “La intención es que pongan ya a prueba en una situación simulada, una cuestión que es muy similar a lo que se generaría en una estructura colapsada. Es importante que el rescatista tenga el temple para poderlas manejar ya en una situación real, por eso los queremos aproximar aquí en esta simulación para que sepan a lo que se van a enfrentar”. Luis Ochoa Bravo, instructor, ERUM
Tras un par de horas para romper concreto y cortar varillas, por fin llegan a auxiliar a una supuesta víctima que se encuentra entre los escombros.
Los rescatistas penetran hasta la zona donde una persona se encuentra atrapada de una extremidad bajo una loza y trabajan para poder extraerla y brindarle atención médica.
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Con una barreta y trozos de madera hacen una palanca para liberar su pierna, lo inmovilizan, y lo extraen de la zona de desastre.
Experiencia de elementos de emergencias en entrenamiento
Daniela Vilchis comparte parte de lo que sintió al participar en el ejercicio.
- “Sinceramente, es miedo, pero voy tranquila, voy segura. Es confianza porque sé que mis compañeros también están al pendiente de mí, y que no me dejarían. Aquí es confiar unos con otros y esa es mi motivación y seguir adelante”. Daniela Vilchis, socorrista, ERUM.
El ejercicio se realiza bajo estrictas medidas de seguridad.
- “Todo el personal que entre, deben de tener el equipo para estar allá adentro y tener las condiciones óptimas para laborar en cuestión al equipo de protección personal, el oficial checa desde el casco, protector de ojos, el protector de partículas”. Juan Jiménez Reséndiz, instructor, ERUM.
Con esta simulación, concluyeron el curso en el que se usaron maniquíes y se crearon distintos escenarios, en esta ocasión bajo una tormenta con ayuda de una pipa de bomberos.