Tras reapertura, en playas de La Paz, Baja California Sur, cientos de ciudadanos se volcaron y hasta madrugaron para poder alcanzar un lugar, sobre todo en las dos más concurridas.
En el primer de semana de la reapertura de playas en La Paz, decenas de vehículos comenzaron su arribo a la zona de Balandra y Tecolote, incluso desde las 6 de la mañana.
Familias llegaron temprano para apartar un lugar y poder ingresar en el horario establecido, de 11:00 a 20:00 horas. Algunas familias intentaron conseguir un lugar y no pudieron, así que lo intentaron el sábado y otros el domingo, según platicaron.
La mesa de seguridad en salud determinó a partir del 1 de septiembre la reapertura gradual de las playas de este destino turístico.
Nueve en total, seis de ellas en la capital y tres en delegaciones. Se trata de las playas El Coromuel, La Concha, El Tesoro, Pichilingue, El Tecolote y Balandra, así como La Ventana, Los Barriles y Cerritos.
El gobernador de Baja California Sur, Carlos Mendoza, informó que vigilarán el respeto al aforo permitido del 30 por ciento, y el cumplimiento de protocolos de bioseguridad de parte de prestadores de servicios de la zona de playas.
Edgar Vindo Vázquez, director municipal de Protección Civil, señaló que apenas al iniciar el horario de apertura, las playas ya estaban con el aforo permitido del 30%, por lo que con altavoces regresaban a los automovilistas que intentaban llegar.
Autoridades municipales estimaron que más del 60% de los asistentes a las playas eran residentes del estado.
Al anunciar la reapertura de playas, integrantes del Comité Estatal de Seguridad en Salud pidieron a la población “cautela” y respetar los protocolos de seguridad. Indicaron que el estado registra tres semanas con reducción de casos, pero pidieron “prudencia” a los residentes y turistas.