“Un actor malo” es una película mexicana, dirigida por Jorge Cuchí, que protagoniza la actriz Fiona Palomo y Alfonso Dosal. La cinta llegará a cines a partir del 4 de abril.
La historia se desarrolla en un set de filmación, donde todo dará un giro inesperado cuando el actor principal toma una decisión que afecta a su coprotagonista. Un hecho que abrirá una conversación sobre el consentimiento, el abuso y la necesidad de creerle a las víctimas.
Daniel (Dosal) y Sandra (Palomo) interpretan a dos compañeros de elenco, que están participando en una película que puede ser muy importante para sus carreras.
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El rodaje comienza bien, los actores tienen una buena relación, incluso ellos se consideran amigos, pero todo cambia cuando, después de tener una conversación sobre cómo se filman las escenas de sexo en las películas, Daniel, decide hacer un cambio en una escena de cama.
La historia de “Un actor malo” comenzó por una película que hicieron Marlon Brando y María Schneider
El creador de la historia “Un actor malo”, Jorge Cuchí compartió con Unotv.com, que la idea de esta película nació hace años, cuando escuchó una entrevista de la actriz María Schneider, quien filmó junto a Marlon Brando la cinta “El último tango en París”.
“Después de 40 años de haber hecho la famosa escena de la mantequilla, ella dijo en la entrevista que se había sentido violada”, dijo Cuchí.
Tras esta declaración, Jorge buscó la entrevista de Bernardo Bertolucci explicando el evento: “dijo que él se puso de acuerdo con Marlon Brando para untarle mantequilla a María Schneider en sus partes íntimas sin su consentimiento y sin decirle nada porque lo que quería de ella era su reacción de rabia y humillación real, como mujer no como una actriz”.
Tiempo después, recordó Jorge, que cuando le preguntaron a Bertolucci si se sentía mal por lo que hizo él dijo que “tantito”, pero que no se arrepentía porque un artista tiene que tomarse la libertad de hacer lo necesario para que su obra sea “impresionante”.
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A partir de ese momento el director y escritor de “Un actor malo” comenzó a cuestionarse sobre qué hubiera ocurrido si esto lo hubiera dicho en la actualidad Bernardo Bertolucci.
“Ya existe la figura del coordinador de intimidad para tratar de controlar la conducta de los hombres y lo que me decidí a hacer fue una especie de invitación o de llamada atención, sobretodo diciéndole a los hombres, que los tiempos en que se podían salir con la suya se acabaron, que estamos en una nueva época y de ahí sale la historia de este personaje”, dijo Cuchí.
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Fiona Palomo vivió duros momentos en rodaje
Fiona Palomo da vida a una mujer, que tras vivir abuso sexual, por parte de su compañero de trabajo, comienza poco a poco a racionalizar lo sucedido, a ser cuestionada, a dudar de sus creencias, enojarse y posteriormente sacar una fuerza interna para exigir justicia.
La hija de Eduardo Palomo aseguró, que en todo momento se sintió cómoda, pues el guion, el director y equipo de trabajo lo permitieron.
“Creo que cuando tratas con escenas, personajes o eventos de este tipo tienes que marcar esa línea muy bien, eso me permitía llegar el siguiente día y el siguiente día con energía para poder hacer estas escenas y que se sintiera que le acababa de suceder algo así, pero pero es un es un reto enorme y es duro”, reveló la protagonista de “Un actor malo”.
“Un actor malo”, una historia dolorosa, pero real
La película “Un actor malo” se trata de una reflejo de una realidad que se vive en México y en el mundo, sobre las fallas e injusticias en el sistema penal.
Alfonso Dosal da vida a Daniel Zavala, un actor que se cree indestructible y que está seguro de que es una gran persona, un hombre que se niega a reconocer la violencia que ejerce justificándose o escondiéndose. Un personaje que hará sentir a gran parte del público frustrado, enojado e impotente.
Por su parte, Fiona Palomo interpreta a Sandra Navarro, la actriz que protagoniza la película junto a Daniel, ella se convertirá en el centro de la historia y le dará voz a las víctimas: “refleja la importancia de ser escuchada, apoyada y de saber que, cuando vas a decir algo (o a denunciar) te van a creer”.
