Las películas de terror, en especial las del género slasher, están teniendo un resurgimiento tras el éxito de clásicos como “Halloween” y “Scream”, y ahora toca el turno a “La masacre de Texas”.
El clásico de 1974, y que introdujo a uno de los personajes más emblemáticos del cine: Leatherface, regresa de la mano de David Blue Garcia en esta secuela directa de la original, que se salta todas las demás películas de la saga, y que ya se encuentra disponible en Netflix a partir de este viernes.
¿De que va la secuela de “La masacre de Texas”?
En esta nueva versión de “La masacre de Texas”, Leatherface ha estado oculto y “dormido” durante 50 años, pero todo eso cambia cuando un grupo de amigos, decididos a crear su propia comunidad utópica, llegan a su viejo y olvidado pueblo.
Ellos creen que encontraron el lugar perfecto para escapar de las presiones de la sociedad, sin darse cuenta de que ese es el hogar de un monstruo y su presencia ahí lo hará despertar.
La versión de Netflix no menciona las películas relacionadas con la original estrenadas en décadas pasadas (2003 y 2013) y propone una historia en la que nadie ha visto a Leatherface desde hace años y el mundo ha olvidado su existencia, lo que le da el elemento de la sorpresa para atacar a sus víctimas cuando han bajado la guardia, además de que la decisión de conectarse con la historia de los 70 permite el regreso de otros personajes icónicos.
Como el de Sally Hardesty, que fue la única víctima que logró escapar de Leatherface en la película de los años 70.
La primera Masacre de Texas fue censurada en algunos países por su alto contenido sangriento y por la violencia, pero eso no detuvo al director de esta nueva versión, quien dijo que no tuvo que bajar el tono o la cantidad de sangre y matanza para su película.