Plutarco Haza a sus 49 años asegura no tener miedo a envejecer pues considera que nunca ha tenido que vivir de su físico como algunos modelos o galanes de televisión.
El actor reveló que sus modelos a seguir como actor son Héctor Bonilla, Alejandro Camacho, Fernando Luján o Humberto Zurita.
“Yo veo que mis ídolos comenzaron a tener sus mejores papeles después de los 50 años así que estoy muy emocionado porque todavía tengo mucho que ofrecer”, aseguró Plutarco Haza en entrevista exclusiva para UnoTv.com.
Añadió Plutarco que hace 20 años los actores de su edad solamente interpretaban a los abuelitos de las historias pero que eso ha cambiado: “ahora hay tantas cosas que contar y contenidos tan diferentes por la necesidad de hacer cosas nuevas”.
“Puedes ver a Joaquín Cosío o incluso a Ignacio López Tarso haciendo papeles muy interesantes, los protagónicos ya no sólo los tienen los chavitos o chavitas bonitas, hay cosas muy atractivas para todos”.
Plutarco Haza, actor.
“He tenido una carrera muy afortunada”: Plutarco Haza
El actor declaró que es una persona muy afortunada pues la mayoría de los actores sólo tienen un punto o dos importantes en sus carreras: “la mayoría después de un éxito siguen haciendo cositas, pero en mi caso no ha sido así”.
“Mirada de mujer”, “Todo por amor”, “Las Aparicio, “El señor de los cielos” y recientemente la serie de Luis Miguel son proyectos que considera han sido muy importantes para él a nivel popular.
De vuelta al teatro
Después de haber montado junto a su ex Ludwika Paleta y Dominika Paleta la obra “La prueba perfecta” hace 20 años, Plutarco Haza regresó al teatro ahora para dar vida al papá del personaje que interpretó tiempo atrás.
“Es una gran nostalgia porque pasaron 20 años, viví tantas cosas que ni me acordaba del texto”, aseguró el actor.
Plutarco Haza además de participar en la obra “La prueba perfecta” trabaja en otras dos puestas en escena, está por estrenar dos series de televisión y regresará a la televisión.
“Hice dos películas en inglés y en la primera que filmé me costó trabajo porque yo pienso, siento y me enojo en castellano, tomé clases de acento para que se me entendiera muy bien lo que decía”, finalizó Plutarco con gran entusiasmo.