Dicen que la vez que “Chabelo” cacheteó a “Cantinflas” fue muy fuerte, y el comediante no tuvo más remedio que contenerse y seguir actuando como un profesional.
Muere Xavier López “Chabelo”
El momento que unió a ambas leyendas del espectáculo mexicano, Xavier López “Chabelo” y Mario Moreno “Cantinflas”, que se hizo viral por un memorable discurso, ocurrió en la escena de una película y, de acuerdo con conocedores, al “cuate” se le habría pasado la mano.
La vez que “Chabelo” cacheteó a “Cantinflas”
Esta anécdota de “Chabelo” ocurrió durante la filmación de la película “El Extra”.
En una escena, Xavier López y Mario Moreno, en sus respectivos personajes, intercambian golpecitos porque el famoso niño quiere golpear a los hermanitos de “Rosita”, después de que le rompieran su bicicleta; es ahí donde se encuentra con “Cantinflas”.
“El Extra” se estrenó en 1962 y fue protagonizada por “Cantinflas” y Alma Delia Fuentes. Aunque “Chabelo” tuvo un papel menor en la historia de un modesto trabajador de cine que desempeña varios papeles como extra, su participación es muy recordada.
“No llore, no llore, no sea tontito, se va a arreglar, fue un accidente transitorio, como se dice, de tránsito, no se ponga chipil. ¡No llore, no llore, sea hombre, sea hombrecito!”
Le dice “Cantinflas” a “Chabelo”
A lo que el niño le responde:
- “Sí soy hombrecito” y enseguida “Chabelo” le propina la famosa cachetada.
Se sabe que las cachetadas no estaban en el guion, los golpes de Xavier fueron muy reales y dolorosos. Si esto llegó a desconcertar a “Cantinflas”, el comediante lo disimuló ante las cámaras, pues continuó como un profesional a pesar de la bofetada y los jaloneos.
Para cerrar la escena, “El Extra” le dice a “Chabelo” que le dará un documento con el que se compromete a pagar lo que le deben evitando el contacto físico con él y con un tono de voz diferente.
Así contó Chabelo la anécdota de la cachetada a Cantinflas
En alguna ocasión Xavier López “Chabelo” confesó que a mitad de la grabación, detuvieron la escena y el director le dijo “todo bien, nada más no toques al Señor Mario“.
Chabelo recuerda que aquella instrucción la escuchó Cantinflas, quien se metió en la conversación aclarando “No, déjalo… que me toque…” y así fue como Xavier López tomó la instrucción al pie de la letra