Si eres a los que, con frecuencia, les dicen frases como “ya estás grande”, “debes madurar” o “los juguetes son para niños”, puede que seas un kidult y no estabas enterado. Pero, ¿qué es un kidult? Unotv.com te lo explica
¿Qué es ser un kidult?
La expresión se utiliza para referirse a los adultos, de 25 a 40 años, que tienen un gusto por los juguetes, caricaturas y cosas infantiles o adolescentes. Aunque no se tiene registro de cuándo surgió la palabra kidult, ésta representa la unión entre las palabras en inglés kid (niño) y adult (adulto).
“Kidult es un término que se refiere a todos esos adultos que tienden a comprar artículos destinados al consumo infantil, desde videojuegos hasta figuras de acción coleccionables. Para ser catalogado como kidult no basta con tener un artículo en específico, sino que debe haber ya una pasión al respecto”, señala en entrevista el psicoanalista Rodrigo Asseo.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), los kidult pertenecen, comúnmente, a un extracto social con un poder adquisitivo medio-alto.
Otra de las características de estas personas, según la Condusef, es que en su mayoría son profesionales y tienen un buen trabajo.
La comisión explica que los kidults suelen gastar en productos dirigidos a los jóvenes, tales como:
- Dispositivos MP3
- Consolas de videojuegos
- Celulares de última generación
- Juguetes de edición especial
- Relojes vistosos
- Cómics
Los artículos más socorridos por los kidults suelen ser los juguetes de colección, videojuegos, cómics, consolas de videojuegos y gadgets electrónicos; muchas veces sin importar el monto a pagar.
Características que los definen
El psicoanalista Rodrigo Asseo señaló a Unotv.com que para ser considerado un kidult se tienen que conjuntar ciertos elementos clave; así los puedes identificar:
- Tienen una cierta nostalgia infantil por el juego y los juguetes que recuerdan esa etapa vivida
- Tienden a ser personas con ciertos rasgos obsesivos y compulsivos que se plasman, en primera instancia, en una obsesión por algún tema en particular, como puede ser un anime
- Sienten la necesidad compulsiva de poseer objetos como figuras de acción, cómics, etcétera, que representen ese anime
- Son personas que están muy en contacto con su lado infantil, si bien pueden ser adultos responsables; en casa proyectan abiertamente esa parte lúdica cual niños; incluso, hay unos que en cuanto llegan a casa se quitan su seria ropa de oficina y se disfrazan de algún personaje infantil
¿Cuánto gastan los kidults?
Todo parece indicar que los kidults están dispuestos a pagar el costo que sea por adquirir un artículo de colección o una consola de videojuego. La Condusef destacó que los kidults llegan a desembolsar casi 23 mil pesos por algún artículo tecnológico y arriba de 10 mil pesos por juguetes específicos de colección.
Son nostálgicos
Aunque los kidults suelen adquirir productos destinados a jóvenes, lo hacen por un sentido de nostalgia hacia su niñez, según considera Mariela Mociulsky, directora de la consultora Trendsity; sin embargo, eso no los hace menos confiables que el resto de los adultos.
“Los kidults tienen un perfil nostálgico y lúdico, pero son tan responsables como cualquiera”.
Mariela Mociulsky, directora de la consultora Trendsity.
¿Se puede equiparar con el Síndrome de Peter Pan?
Si bien el término es relativamente nuevo, hay quienes consideran que los kidults padecen el llamado Síndrome de Peter Pan, el cual se diagnostica, en psicología, a aquellas personas que se rehúsan a madurar, sin que por ello rayen en la irresponsabilidad.
Sin embargo, de acuerdo con el especialista Asseo, sí existen diferencias, pues el síndrome de Peter Pan se caracteriza por rasgos de inmadurez, en muchos aspectos de forma desmedida, con un acentuado egocentrismo y dependencia. Son esas personas que pueden ser descritas como ‘un niño atrapado en el cuerpo de un hombre’. Como ejemplo claro tenemos a Michael Jackson que, al haber sido explotado laboralmente desde niño, de alguna forma quedó fijo emocionalmente en su infancia y su crecimiento y maduración emocional se vieron truncadas.
Esto no sucede con los kidults de hoy, pues como señala el experto: “en general tienden a ser adultos productivos, con una vida común, pero en casa digamos que es donde las cosas se ponen infantilmente divertidas. Hay que entender que no podemos generalizar, ya que cada persona tiene una propia historia y ciertos trazos en ella que determinan su deseo y goce adulto”.