Jim Morrison murió hace 50 años víctima de un paro, pero muchos dicen que de una sobredosis, en París, Francia.
El 3 de julio de 1971 el mundo de la música se estremeció con la muerte del cantante de “The Doors” a la edad de 27 años, uniéndose así al llamado “club de los 27”, artistas que murieron a esa edad, tal como Janis Joplin, Amy Winehouse o Kurt Cobain.
Por lo que repasamos algunas de sus mejores canciones con “The Doors”.
Light my fire
Light My Fire viene en el álbum debut de la banda, el cual fue grabado en agosto de 1966 y lanzado en enero de 1967. Alcanzó el número uno en la lista Billboard de Singles pop en 1967 y luego fue relanzado en 1968 alcanzando el número 87.
People are strange
People are strange es un sencillo que viene en el segundo disco de la banda llamado “Strange Days”. La canción alcanzó el puesto 12 de ventas en el “Hot US 100 Chart”.
Riders on the storm
Riders on the storm viene en el álbum L.A Woman, el último disco con participación de Morrison. Alcanzó el puesto número 14 del Billboard Hot 100 en los Estados Unidos.
Love me two times
Love me two times pertenece al segundo disco de la banda llamado “Strange Days”.
Roadhouse blues
Roadhouse blues es una canción de blues rock escrita por la banda para su disco Morrison Hotel de 1970.
Acuden a su tumba a rendirle tributo
Alrededor de un centenar de admiradores se acercaron este sábado a la tumba de Jim Morrison, en el cementerio parisino de Père Lachaise, para rendir homenaje al cantante en el 50 aniversario de su muerte.
Una multitud de fans se acercaron a la lápida para recordar al cantautor estadounidense, fallecido el 3 de julio de 1971 en París, Francia.
Sin embargo, a causa de la crisis sanitaria, el panorama era muy distinto al de hace 10 años, cuando acudieron al cementerio Ray Manzarek y Robby Krieger, exteclista y exguitarrista de The Doors, grupo del que Morrison era vocalista.
“Normalmente, me encuentro a mucha gente que hoy no está aquí, ingleses, suecos, a causa del contexto sanitario”, comentó a la AFP Christelle, de casi 50 años, sentada junto a un árbol no muy lejos de la tumba del “Rey Lagarto”, protegida por barreras y vigilada de cerca por dos policías.
“Ya me han hecho fotos unas veinte veces”, añadió esta “gran fanática de los Doors”, que “cada aniversario de la muerte o del nacimiento de Jim” visita su tumba. “No todos los años”, matizó, “solo las cifras redondas: 45 años, 50 años…”.
Por su parte, Zoltan, un húngaro de unos 40 años, viajó desde Budapest para la efeméride de la muerte. “Estoy de lleno en el tema, he traducido al húngaro una obra estadounidense que hace un paralelismo entre Morrison y Arthur Rimbaud”, explicó a la AFP.
“Morrison estaba atrapado en su personaje ‘rock and roll’ pero le gustaba la literatura, intentaba escapar. Con 27 años (cuando murió) yo no había hecho todo lo que él había conseguido, estaba estudiando en la facultad y estaba muy lejos de saber tanto como él”, agregó, emocionado.
Oficialmente, Jim Morrison murió de un paro cardíaco en su apartamento parisino, pero en los últimos años la hipótesis de que habría fallecido por una sobredosis en un club de la capital francesa, Rock’n’Roll Circus, ha ido ganando terreno, alimentada por libros y entrevistas con testigos de la época.