Harvey Weinstein denuncia condiciones insalubres en prisión
Harvey Weinstein presentó una denuncia por las condiciones insalubres que vive en la cárcel en la que está mientras espera su juicio por violación y agresión sexual.
El exproductor de Hollywood denunció a la ciudad de Nueva York y su departamento de prisiones, por no proveerle servicios médicos adecuados.
Cabe recordar que el fundador de la productora Miramax está en la cárcel de Rikers Island en espera de su segundo juicio.
Weinstein menciona la querella, como lo retoma la agencia EFE, es que los servicios que recibe se prestan en condiciones antihigiénicas.
De acuerdo con su abogado Imran H. Ansari, la última vez que visitó a su cliente tenía salpicaduras de sangre en su uniforme de prisión, posiblemente de sueros intravenosos y ropa que no había sido lavada durante semanas.
“Ni siquiera le habían proporcionado ropa interior limpia, condiciones sanitarias poco saludables para alguien con problemas médicos graves”.
Imran H. Ansari, abogado de Harvey Weinstein
Además, comparó la cárcel Rikers con un “gulag”, campos de concentración del régimen soviético en Rusia.
“Me pregunté si estaba en una prisión que su supone debe ser administrada de acuerdo con nuestra constitución o en un gulag donde los prisiones son tratados como animales”.
Imran H. Ansari, abogado de Harvey Weinstein
El abogado señaló además que “la indiferencia” hacia las necesidades médicas de Weinstein “es un ejemplo de por qué Rikers Island ha estado bajo el intenso escrutinio de los funcionarios y el público, y es objeto de supervisión federal”, según indican los medios.
Los problemas médicos de Harvey Weinstein
El productor de 72 años tiene varios padecimientos médicos como leucemia, diabetes, enfermedad de la arteria coronaria, apnea obstructiva del sueño, obesidad y presión arterial alta.
Debido a esto fue hospitalizado en abril y julio pasado y en septiembre fue sometido a una cirugía del corazón.
En 2020 Weinstein recibió una condena de 23 años de prisión en Nueva York por violación y agresión sexual, pero en abril pasado ganó una apelación para anularlo argumentando errores procesales, por lo que se ordenó un nuevo juicio que se celebrará a principios del próximo año.
