La separación de Andrea Legarreta y Erik Rubín podría no terminar en divorcio, al menos así lo dio a conocer el cantante, quien tal como lo anunciaron en el mensaje de su ruptura, considera que entre ellos puede existir una reconciliación.
El matrimonio de Erik Rubín y Andrea Legarreta duró 22 años. Los famosos tienen dos hijas y aunque se pusieron una pausa como pareja, siguen con planes en conjunto como irse de vacaciones, tomar decisiones como familia y atender los negocios que comparten.
Erik Rubín y Andrea Legarreta no piensan en el divorcio
En un encuentro con medios de comunicación, Erik Rubín dejó claro que ni él ni su esposa han pensado aún en la posibilidad de divorciarse.
“Nos amamos tanto que precisamente queremos saber dónde estamos parados y a ver en qué termina esto. Tenemos una gran relación, tenemos promo juntos, tenemos un proyecto, puro amor y buena onda (…) No hemos hablado de ello (el divorcio)”
Señaló Erik Rubín
En lo que respecta al futuro inmediato, Rubín y Legarreta tienen vacaciones programadas en conjunto y también compromisos laborales.
El asunto de que la pareja pueda darse una nueva oportunidad en el amor no es nuevo, pues dejaron esta posibilidad abierta desde que lanzaron el comunicado de su separación.
Una vez que dieron a conocer que por el momento no estarán juntos, las especulaciones sobre lo que habría provocado su distanciamiento no han parado e incluso Andrea Legarreta ya aclaró si se debe a la existencia de un tercero en discordia.
Al esposo de la conductora se le relacionó sentimentalmente con Apio Quijano, de Kabah, por la cercanía que ha demostrado hacia él en los escenarios de una gira que comparten, situación que tanto el ex Timbiriche como el integrante de la banda de “La calle de las sirenas” se han limitado a describir como un asunto que sólo tiene que ver con un show.
Además de que los une ser padres de Mía y Nina, el cantante y la conductora son socios, entre sus negocios se encuentra una cadena de gimnasios.