El próximo 23 de mayo llega a las salas de cine de México “Dante y Soledad”, una película que retrata la maternidad desde un punto lejano a la idea romantica que existe sobre esta etapa.
En entrevista con Unotv.com, Alexandra de la Mora, directora; e Irene Azuela, protagonista, hablaron sobre este proyecto basado en el cuento “El matrimonio de los peces rojos” de Guadalupe Nettel.
Alexandra de la Mora e Irene Azuela no solo comparten una amistad de años, sino también una inquietud artística que las llevó a colaborar en esta ópera prima. “Nos conocemos desde hace mucho tiempo y siempre hablamos de qué proyectos nos inspiran y nos representan”, comenta Irene. Esta complicidad se materializó cuando encontraron el cuento de Nettel, que las impactó profundamente y se convirtió en el punto de partida para “Dante y Soledad”.
Desromantizando la maternidad en “Dante y Soledad”
“Dante y Soledad” no solo busca contar una historia, sino también visibilizar una forma de violencia hacia las mujeres: la romantización de la maternidad. Irene Azuela explica: “La idea de la madre abnegada y santa es una violencia normalizada. Cuando una mujer se queja o dice que no puede más, se le exige que siga adelante como si fuera una obligación sagrada”. La película presenta una visión realista de la maternidad, mostrando sus luces y sombras, y desafía los estereotipos tradicionales.
La conexión personal con el tema de la maternidad es evidente en el trabajo de ambas. “Pusimos toda nuestra experiencia en este proyecto”, dice Irene. La película refleja no solo sus vivencias, sino también las del equipo que trabajó en ella, creando un relato auténtico y conmovedor. “Ser madre te acerca a una vulnerabilidad que nunca habías sentido. Ahora siento que no puedo morir porque tengo que estar para mis hijos”, confiesa Irene, resaltando la intensidad de los sentimientos que abordaron en la película.
La importancia del sonido en la cinta
Uno de los aspectos más destacados de la película es su diseño sonoro. Alexandra subraya la relevancia del sonido en la narrativa: “La película nace a partir del sonido. Concebí y dirigí la película pensando en cómo el sonido podía potenciar las emociones”.
Gracias al talento de la diseñadora sonora Lena Esquenazi, lograron crear una experiencia auditiva que sumerge al espectador en los momentos de desesperanza y ansiedad que vive la protagonista. “Es fundamental que se vea en cines porque está concebida para un sistema 5.1 que envuelve al espectador desde todos lados”, añade la directora.
“Dante y Soledad” invita a los espectadores a cuestionar las narrativas idealizadas sobre la maternidad y a reconocer la complejidad y las dificultades que conlleva. La película estará en cines a partir del 23 de mayo.