Entretenimiento

El trágico momento en que murió, Chato Padilla, el cartero de “El Chavo del 8”

| 13:58 Redacción Uno TV
“Jaimito, el cartero” fue uno de los personajes más entrañables de “El Chavo del 8”. Foto: Cuartoscuro

El actor Raúl Chato Padilla, quien interpretó al entrañable “Jaimito, el cartero” en “El Chavo del 8″, tuvo una muerte que marcó a sus compañeros del programa, de acuerdo con lo que Roberto Gómez Bolaños, “Chespirito”, reveló en una biografía.

Según el creador e intérprete de “El Chavo del 8”, él encontró sin vida a Chato Padilla en un set de grabación. Cuando el actor falleció tenía 75 años, su deceso fue a causa de una diabetes que aunque en un principio pudo controlar, después le dio complicaciones.

La trágica muerte de Raúl Chato Padilla, “Jaimito, el cartero” en “El Chavo del 8”, programa que dejó en la memoria colectiva a personajes como “Don Ramón”, “El Señor Barriga” y “La Chilindrina” ocurrió el 3 de febrero de 1994 y “Chespirito“ recuerda el momento en su libro autobiográfico, “Sin Querer, Queriendo” detallando que lo estaba esperando poco después de grabar pero al darse cuenta que el actor no bajaba, él subió unas escaleras y fue cuando lo encontró “con los ojitos cerrados” porque ya estaba muerto.

“Después de grabar lo estuve esperando en la escalera para demostrarle que yo también podía brincar desde el quinto escalón de la escalera. Pero no bajaba. Entonces subí para ver si le pasaba algo y lo que pasaba es que ya estaba muerto. Tenía los ojitos cerrados, como si nomás estuviera durmiendo. Hasta parecía que estaba soñando algo bonito, tenía cara de estar contento. Pero no puede ser, porque ni modo que le diera gusto morirse”

Compartió Roberto Gómez Bolaños “Chespirito” en su libro

En la publicación, Gómez Bolaños también detalló que quizá, Chato Padilla evitó la fatiga al momento de su muerte porque “‘Jaimito‘ siempre decía que quería evitar la fatiga… o sea que ya evitó la fatiga para siempre”.

Raúl Chato Padilla nació el 17 de junio de 1918 en Monterrey. Se desarrolló en la actuación gracias a su padre, el reconocido empresario teatral don Juan Padilla, quien le dio su primer contacto con ese mundo.

Entre el cine y la televisión, participó en más de 60 producciones. Sus restos fueron cremados en el Panteón Civil de Dolores, en Ciudad de México, y entregados a su familia.

El día de su velorio, su viuda Lili Inclán, le dedicó las palabras:

“Se ha ido a una gira muy larga, por lo que no lo volveremos a ver, pero lo sentimos con nosotros, con nuestros corazones”.

Te puede interesar:

Qué opinas