Un luchador de artes mixtas, conocida frecuentemente por sus siglas en inglés como Mixed martial arts (MMA), ganó su combate, pero tuvo un costo un poco alto y doloroso.
En un evento del Captain’s Fight Club en Fargo, Dakota del Norte, de la semana pasada, el peso pluma Dylan Kiskila anotó un fantástico nocaut con una patada en la cabeza sobre su oponente Kai Duque.
Pero en el proceso de ganar la pelea por nocaut, Kiskila se rompió la pierna. “Escuchamos un fuerte chasquido, casi como si se hubiera roto la pierna con la patada alta”, dijo el narrador de la pelea.
No está claro exactamente cuándo ocurrió la lesión, ya que al principio Kiskila se estaba poniendo en posición para dar seguimiento al golpe, pero cuando el árbitro saltó para detenerlo, la pierna izquierda de Kiskila simplemente cedió y terminó sentado en la colchoneta.
Kiskila se comunicó con la MMA Fighting y confirmó que la lesión era una fractura en tibia, la misma lesión que sufrió Conor McGregor en su tercera pelea con Dustin Poirier en UFC 264, en julio pasado.
Según Kiskila, su “espinilla se envolvió literalmente alrededor de la cabeza de Duque”.