La policía de Philadelphia busca a un grupo de cuatro aficionados del América que asesinaron a un hombre durante la madrugada del jueves tras el partido entre a las Águilas y el Philadelphia Union en la semifinal de la Concachampions.
Los reportes policiales señalan que los hechos ocurrieron la madrugada del 16 de septiembre dentro del restaurante Cheesesteak Pat’s King of Steaks tras el duelo que el Philadelphia perdió frente al América en la semifinal de la Concachampions.
Los aficionados que portaban los jersey amarillos del América agredieron a un grupo de personas entre los que se encontraban dos hombres, uno de 64 años y su hijo de 28, este último identificado como Isidro Cortés quien perdería la vida por las lesiones sufridas.
Las víctimas se detuvieron en Pat’s Steaks después del juego para comer algo antes de regresar a a su casa ubicada en Queens, Nueva York.
— PressPort (@PressPortmx) September 18, 2021
@PhillyPolice ofrece $20,000 dólares a quien ayude a reconocer a los sospechosos que asesinaron el miércoles a un hombre en Filadelfia, que habían estado en el partido entre Philadelphia Union y América.
La dependencia reveló estas fotos y el vídeo de lo sucedido. pic.twitter.com/XGqnnKjOwV
“Todos eran del mismo equipo, entonces yo no sé porque se llegaron a agarrar”, relató Eduardo Rangel, familiar de las víctimas que estaba presente en el restaurante. “Estaban hablando de fútbol y no sé qué palabras se cruzaron y de ahí comenzó la pelea”.
Rangel explicó que todo ocurrió después de la una de la madrugada y fue de repente. “Íbamos a comer y él (Isidro, la víctima) estaba hablando con el grupo que estaba allí”.
Isidro Cortes fue declarado muerto en el lugar mientras los sospechosos huyeron en una camioneta; la víctima fue golpeada con los puños y con una tapa metálica de un bote de basura, mientras sus dos acompañantes también resultaron heridos.
Por su parte, el propietario del restaurante indicó que los culpables de lo ocurrido dejaron un teléfono celular, latas de cerveza y otros artículos personales en el lugar, por lo que se pudo recuperar el ADN, además de tener sus rostros grabados por las cámaras de vigilancia.
Hasta el momento, ninguno de los dos equipos ni la Concacaf se han manifestado al respecto.
