A un mes del Mundial de Qatar, el astro brasileño Neymar se reencontró este lunes con su pasado al regresar a Barcelona para asistir a la primera sesión del juicio por las supuestas irregularidades en el polémico fichaje que lo llevó al club catalán hace casi una década.
Vestido con traje negro y gafas de sol, el ahora delantero del París Saint-Germain, que salió abruptamente del Barça en 2017 con un millonario pase al club francés, llegó a la Audiencia de Barcelona acompañado de sus padres, también procesados por este caso.
El futbolista, que la noche anterior anotó el gol de la victoria de su equipo ante el Marsella en la liga francesa, permaneció casi dos horas en la sala, sentado en la primera fila de un extenso banquillo de acusados, compartido con sus padres, los expresidentes del FC Barcelona Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu o los abogados de sus exclubes, Barça y Santos.
Neymar, que a partir del 20 de noviembre volverá a liderar a la “Seleçao” en el Mundial, está acusado de un delito de corrupción en los negocios por la Fiscalía, que pide para él dos años de cárcel y diez millones de euros (9,7 millones de dólares) de multa.
Y es que, pese a que el FC Barcelona cifró inicialmente el fichaje de Neymar en 57,1 millones de euros (40 millones para su familia y 17,1 para el Santos), la justicia española estimó que alcanzó al menos los 83 millones.
Para el fondo de inversión deportiva propiedad del grupo brasileño de supermercados Sonda, el Barça, Neymar y más tarde el Santos se aliaron para ocultar el monto real de la operación a través de otros contratos de los que ellos quedaron fuera.
“Neymar Junior, con la connivencia de sus padres y del FC Barcelona, y sus dirigentes en el momento, y del Santos FC (…) defraudó los legítimos intereses económicos de DIS, estafándole”, resaltó este jueves Paulo Nasser, abogado de la empresa, que denuncia que los derechos del jugador “no se vendieron al mejor postor”.
Sin embargo, los abogados de Neymar argumentan, sin embargo, que su cliente no cometió ningún delito, ya que los 40 millones de euros correspondieron a una “prima de fichaje legal y habitual en el mercado futbolístico”, y cuestionan que España tenga jurisdicción para tratar el caso.
La pena más alta que solicita el Ministerio Público es sin embargo para Rosell, de cinco años de cárcel por corrupción y estafa.
Al término de la audiencia, el bufete de abogados Baker McKenzie, que defiende a Neymar y su familia, dijo en un comunicado que argumentarán que los tribunales españoles “carecen de jurisdicción para enjuiciar a la familia Neymar ” porque la transferencia involucró a un ciudadano brasileño en Brasil.
¿Qué se espera del juicio de Neymar?
De acuerdo con el cronograma inicial, la declaración del futbolista está prevista para el viernes 21 de octubre o el viernes 28, como las otras cinco personas físicas acusadas.
Poco antes del mediodía, el futbolista abandonó el edificio de la Audiencia, situado en una céntrica zona de Barcelona, acompañado por su madre, mientras su padre decidió permanecer junto al resto de acusados.
En este proceso legal se espera que testifique el martes 18 por videoconferencia, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez.