Apenas ayer 22 de diciembre dio comienzo la nueva temporada de la NBA y hoy se anunció la suspensión del juego de este miércoles entre Houston y Oklahoma City como medida de prevención por posibles contagios de COVID-19 en el equipo de los Rockets.
El partido, el primero suspendido de la nueva campaña, “se ha pospuesto de acuerdo con los protocolos de salud y seguridad de la liga”, informó la NBA mediante un comunicado.
Dicha medida se debe a que los Rockets no pudieron presentar el mínimo de ocho jugadores disponibles para el juego, después de que tres de sus miembros dieran positivo o un resultado no concluyente en sus pruebas de coronavirus y otros cuatro fueran puestos en cuarentena preventivamente.
La NBA también anunció que James Harden, la estrella de los Rockets, no está tampoco disponible para jugar “por una violación de los protocolos de salud y seguridad”, después de que se difundiera un video del escolta en un club nocturno sin cubrebocas.
En las imágenes no se lo ve utilizando el tapabocas recomendado ni tampoco manteniendo la distancia social, motivo por el cual podría habría roto el protocolo de coronavirus impuesto por las autoridades de la NBA.
Al darse a conocer el video Harden publicó en sus redes: “Todos los días es algo diferente., no importa cuantas veces quieran manchar mi nombre, no podrán. La verdad siempre gana”.