A pesar de una temporada irregular a causa del COVID-19 en todo el planeta, eso no ha sido impedimento para que Lionel Messi siga rompiendo récords.
El delantero del Barcelona marcó contra el Valencia, duelo que terminó 2-2, un tanto para la historia: alcanzó las 643 dianas, que lo convierten en el máximo goleador con un mismo club en la historia junto a Pelé, quien ostentaba esta marca en solitario.
Pelé tenía la marca desde hace 46 años
Fueron 46 años los que el brasileño Pelé reinó en soledad después de dejar su huella tras anotar 643 goles con la camiseta del Santos en 757 encuentros, números que realizó a lo largo de 18 años jugando para el Peixe (1956 a 1974).
Marcas históricas
Cabe destacar que las cifras goleadoras de ambas estrellas mundiales se contabilizan solo en lo que fueron partidos oficiales; los datos fueron compartidos por: el club azulgrana, la página web especializada Transfermarket y la Rec Sport Soccer Statistics Foundation (RSSSF), una de las organizaciones de recolección de estadísticas más reconocidas del ambiente.
Este récord que igualó Messi se suma a los que ya había roto como el que tenía Gabriel Batistuta (como máximo artillero de la selección argentina), Telmo Zarra (en la Liga) o Gerd Müller (en Europa).
El sello Messi
El 22 de noviembre de 2014, “La Pulga” se convirtió en el máximo goleador histórico de La Liga al marcar un triplete contra el Sevilla y dejar en el camino a Zarra con sus 252 goles. A poco más de cuatro años de aquella noche, el argentino ya lleva 449 goles en Liga.
César Rodríguez fue uno de los mejores jugadores de la historia de España. El delantero catalán, que vistió la camiseta del cuadro culé durante 13 temporadas, fue el mayor goleador del club blaugrana hasta el 17 de marzo del 2012, cuando Lionel Messi se interpuso en su camino. Con un hat-trick, la “Pulga” alcanzó los 234 tantos con la entidad y dejó atrás los 232 del español. Hoy, a casi 9 años, tiene 643.
Finalmente, fue el turno del alemán Gerd Müller, a quien superó en diciembre del 2012. El ex Bayern Múnich se había convertido en el máximo anotador en un año natural con 85 goles hasta que el rosarino lo pasó por encima en esa temporada al establecer una marca de 91 tantos (79 con el Barça y 12 con la selección argentina).