Los Lakers de Los Ángeles arrasaron la noche del domingo a los Miami Heat, en el sexto juego de la serie final, por marcador de 106 a 93, con lo que lograron coronarse como campeones de la NBA (National Basketball Association), después de una sequía de 10 años de títulos.
LeBron James tuvo una actuación impecable durante el encuentro de la noche, logrando un triple doble y un total de 28 puntos, lo que también le valió ser declarado el Jugador Más Valioso del encuentro (MVP, por sus siglas en inglés), honor que conquista por cuarta ocasión a lo largo de su carrera.
Con el triunfo del domingo, los Lakers cerraron las series finales con marcador global de 4-2, además de lograr su décimo séptimo anillo de campeón, igualando la marca de los Celtics de Boston como la franquicia más ganadora de la historia.
LeBron James sumó 28 puntos, 14 rebotes y 10 asistencias y, a sus 35 años, consiguió el cuarto anillo MVP de su carrera, cumpliendo su promesa de devolver a los Lakers de Los Ángeles a la cima de la NBA y con ello rendir tributo al fallecido Kobe Bryant, previamente había logrado ese reconocimiento en dos ocasiones con los Miami Heat en 2012 y 2013, y con loc Cavaliers de Cleveland en 2016.
Los Lakers de Los Ángeles habían ganado su último campeonato en las finales del año 2010, cuando vencieron, precisamente a los Celtics de Boston, cerrando la en lo más alto un año especialmente doloroso para la franquicia.