El partido entre Argentina y Marruecos tuvo que ser suspendido luego del gol en el tiempo agregado de la albiceleste, todo luego de las agresiones a los jugadores argentinos y la invación al campo en el terreno de juego.
Todo sucedió cuando se agregaron 15 minutos al partido, Argentina se fue al ataque y logró empatar el encuentro 2-2 a falta de tres minutos del agreado. En el festejo del gol de Cristian Medina recibieron agresiones y un petardazo, lo que provocó que el partido fuera suspendido y llevar a los jugadores a vestidores.
Tras varios minutos el partido se decidió reanudar para terminar los tres minutos restantes e incluso el gol se revisó y fue anulado por el VAR por el fuera de lugar. El partido terminó con victoria 2-1 para Marruecos
