Pedro Ramírez Vázquez fue ícono del urbanismo, creador de espacios funcionales para hacer comunidad. En su restirador, el arquitecto concibió la modernidad de México.
Por ello, el Museo Soumaya celebra su 28 aniversario con una exposición inédita dedicada al arquitecto que edificó el rostro del México para el mundo.
“Ramírez Vázquez se convirtió en una constante del México moderno, pero todos los edificios, todos los símbolos que ideó como diseñador gráfico siguen vigentes, siguen presentes; no hay un solo edificio que haya hecho que no exista en nuestra contemporaneidad”.
Alfonso Miranda, director del Museo Soumaya.
De su visión emanó el Museo Nacional de Antropología e Historia, el Estadio Azteca, la Basílica de Guadalupe y el Palacio de San Lázaro.
“Conocer a uno de los personajes clave en la arquitectura mexicana, un gran precursor, un gran promotor de la cultura, pero sobre todo un gran ser humano que supo eslabonar ingredientes adecuados en cada proyecto”.
Dolores Martínez, subdirectora del Patrimonio Artístico Inmueble del INBAL
Sus formas limpias y articuladas dieron vida a imágenes como la de los Juegos Olímpicos de México 1968.
“Su trabajo habla más que nada, la belleza en el orden, en la armonía esencial de la materia y de las formas. Sí me siento muy privilegiada de haberlo conocido”.
Soumaya Slim Domit, consejera Editorial del Museo Soumaya
El genio detrás de la maravilla, figura a través de la exposición con más de mil objetos; bocetos, dibujos, objetos personales y archivos de su acervo bibliotecario.
Aportados por Javier Ramírez, hijo del arquitecto y ahora forjador de su archivo.
“En esta exposición hay muchas cosas que no existían, hasta que ahora las descubrimos y queremos compartirlas que se compartan”.
Javier Ramírez Campuzano, forjador del Archivo Pedro Ramírez Vázquez
La obra de Pedro Ramírez, sigue vigente y se configura como un valuarte para el futuro.
Es la impresión de los visitantes al recorrer las salas que hablan del legado de Ramírez.
“Es trascendental porque todos los íconos que el diseño siguen vigentes a la fecha y habla de un lenguaje pictórico irreconocible es la huella que él dejó y para mí es muy interesante ver cómo sigue su legado hablando por él”.
Samuel Martínez, visitante