Ante la pandemia de COVID-19, la UNAM se une a los esfuerzos en la búsqueda de una vacuna contra esta enfermedad, en entrevista exclusiva para Unotv.com, Edda Sciutto, investigadora del Instituto de Biomédicas y una de las científicas a cargo del desarrollo de la nueva vacuna habla sobre ella y señala que podría estar lista a mediados de 2021.
Uno de los proyectos más importantes contra el COVID-19 que la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) está llevando a cabo en conjunto con otras instituciones educativas y de salud, es el desarrollo de una vacuna, sin embargo, también trabajan en la creación de pruebas de diagnóstico de bajo costo y una mejora en el tratamiento con dexametasona.
De acuerdo con la doctora Sciutto, el objetivo de la vacuna de la UNAM es “proteger a millones de personas de la enfermedad”, y aunque aún se encuentra en fase de pruebas preclínicas, podría estar lista a la mitad de 2021.
“Nuestro candidato vacunal que se llama IIB-rP9, y actualmente estamos organizando todas las acciones para poder completar las pruebas preclínicas este año, para empezar la fase 1 en enero del próximo año. Si todo sale bien podríamos tener la vacuna a la mitad del próximo año, ya con la fase 1, 2 y 3 cubiertas”.
“Pensamos que es importante para desarrollar vacunas nacionales que aseguren la disponibilidad de los biológicos en México”, dice Edda Sciutto.
¿Cómo funciona una vacuna contra el COVID-19 desarrollada por la UNAM?
La investigadora explica que para obtener este candidato a vacuna fue necesario “diseñar un conjunto de fragmentos basados en la proteína S o también conocida como proteína de spike, para conseguir una molécula más pequeña de esta proteína completa”.
- La proteína de spike es la que le da forma de corona al SARS-CoV2, y la cual se asocia a los receptores de la célula del individuo para infectarlo.
Dicha molécula concentra la respuesta del individuo en la parte más importante para entrar a la célula, lo cual podría hacer que la vacuna contra el COVID-19 de la UNAM fuera más segura, eficiente y redujera los efectos colaterales negativos.
“Una vacuna simula lo que ocurre en una primera infección utilizando componentes del patógeno que no son patógenos pero sí inducen una respuesta inmune y lo que es muy importante es que no tienen que inducir enfermedad, sino nada más la inducción de una respuesta inmune y dejar memoria inmunológica en las personas”.
La UNAM en la batalla contra el COVID-19
Adicional al proyecto vacunal contra el COVID-19, la máxima casa de estudios de México también se encuentra trabajando en dos proyectos más que buscan ayudar en la lucha contra el coronavirus.
Uno de ellos es una prueba de inmunodiagnóstico a partir de la técnica conocida como de ELISA, que se ha usado durante muchos años, la cual consiste, según la investigadora en “poner la sustancia del patógeno en una placa y el suero del individuo para ver si tiene o no tiene anticuerpos y eso es una huella de que el individuo estuvo en contacto con el parásito”.
“Esto es una muy importante porque puede hablarnos de qué grado de inmunidad poblacional hay”.
“Actualmente estamos optimizando los ensayos para que en el curso de este mes tengamos un ensayo para ofrecer a la comunidad que pueda ser a muy bajo costo y se aplique en poblaciones extensas para investigar la inmunidad poblacional”, dijo la académica.
El tercer proyecto emprendido por la UNAM consiste en un tratamiento de dexametasona administrado por vía intranasal que de acuerdo con la doctora Edda Sciutto “ya ha sido probado en el Hospital General de México, en el Instituto Nacional de Neurología y en el Instituto de Cardiología” y se encuentra próximo a ser presentado ante la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
“Si logramos evaluar como pretendemos el tratamiento con la dexametasona intranasal y obtenemos los resultados esperados esto sería una enorme cosa para México y para el mundo”.