Los shoebill, mejor conocidos como picozapato, son un tipo de aves que puede llegar a medir hasta 1.5 metros de altura, son capaces de devorar a sus presas completas, entre las que se encuentran los cocodrilos bebé. Pero eso no es todo, este formidable depredador es capaz de, incluso, matar a sus propios hermanos para… indica el sitio especializado Live Science.
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Ave picozapato, un gran depredador
El nombre científico de los shoebill es Balaeniceps rex. Sin embargo, debido a su pico gigante de 0,3 metros de largo también recibe el nombre de picozapato. Su aspecto físico de tipo prehistórico y gran tamaño lo hacen parecer un ave amenazadora.
El pico del picozapato es el tercer pico de ave más grande del mundo.
Aunque se cree que pertenece a la familia de las cigüeñas, lo cierto es que el picozapato es en realidad el único miembro del género Balaeniceps y de la familia Balaenicipitidae, siendo sus parientes vivos más cercanos los pelícanos. Mientras que sus antepasados del orden Pelecaniformes surgieron a finales del período Cretácico (hace entre 145 y 66 millones de años).
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Esta especie de ave habita marismas y pantanos en África Oriental donde se alimenta principalmente de peces y reptiles. Tienen grandes habilidades para la caza en emboscada por su pico gigante y patas largas y delgadas. Y es que, puede permanecer completamente quieto antes de lanzarse hacia adelante para agarrar a una presa desprevenida y tragársela entera.
En su mayoría son solitarios, pero las parejas reproductoras son monógamas y ponen hasta tres huevos en una nidada; aunque, debido a la rivalidad entre hermanos, normalmente solo uno sobrevive hasta la edad adulta. Y suele ser el primogénito más grande, que compite con sus hermanos por la comida o los mata.
El segundo o tercer polluelo son esencialmente repuestos que sirven como respaldo si el primero no sobrevive.
De hecho, un estudio de 2015 publicado en el Journal of African Ornithology encontró que el bagre era su presa más común y constituía alrededor del 71% de sus comidas. Sin embargo, también se sabe que el picozapato se alimenta de anguilas, serpientes e incluso bebés de cocodrilo.
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El ave de pico grande figura como vulnerable en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, y solo quedan entre cinco mil y ocho mil aves .