Un grupo de investigadores crearon un nuevo y fascinante tipo de robot líquido capaz de dividirse en pequeñas gotas para pasar por grietas antes de volver a unirse, lo que lo hace potencialmente útil para la administración de medicamentos.
El cuerpo humano está lleno de pasajes estrechos y sinuosos y barreras casi impenetrables; sin embargo, este diminuto robot líquido está hecho de un fluido magnético que puede romperse y reconstituirse más tarde, justo en el momento que encuentra obstáculos o pasajes estrechos a su paso.
¿De qué está hecho el robot líquido?
Xinjiian Fan de la Universidad de Soochow en Taiwan es el autor detrás de la investigación del robot líquido, el cual fue construido a partir de “ferrofluido”, una suspensión de óxido de hierro y aceite de hidrocarburo.
Para darle movimiento y dividir al robot líquido, los expertos usaron imanes esféricos giratorios para aplicar fuerza sobre la sustancia para que se rompiera en muchos pedazos o se alargara para moverse a través de pasillos estrechos.
De acuerdo con el estudio, el robot líquido puede dividirse en gotas de micrómetros y tiene la capacidad de movimiento en entornos estructurados, la deformación para pasar a través de espacios e incluso la reconfiguración de escala reversible para navegar en espacios muy variables.
Pietro Valdastri, de la Universidad de Leeds en el Reino Unido, dijo que esta capacidad podría cambiar las reglas del juego, ya que un paciente podría ingerir el robot que transporta medicamentos, que luego podría dividirse por dentro, posiblemente en el tracto gastrointestinal, de modo que cada pequeña gota robótica puede entregar el medicamento en el lugar correcto del cuerpo.
Según Bradley Nelson, del Instituto Federal Suizo de Tecnología en Zúrich:
“Otro uso puede ser eliminar los coágulos de sangre en el cerebro que causan accidentes cerebrovasculares, aunque crear un campo magnético lo suficientemente fuerte para mover con precisión el robot dentro del cerebro sería un desafío”.