La exitosa serie coreana “El juego del calamar”, que está rompiendo récords en todo el mundo, ha dado mucho de qué hablar no sólo en Netflix, plataforma donde se estrenó el 17 de septiembre pasado, sino también en México debido a la advertencia de que algunas escenas contienen efectos estroboscópicos, los cuales pueden afectar a espectadores sensibles.
“El juego del calamar”, que pasó de las pantallas a las fiestas al crearse una piñata que ya se vende en territorio nacional, ha generado polémica por los efectos estroboscópicos de algunas de sus escenas; por eso te explicamos qué son.
¿Qué son los efectos estroboscópicos?
En el capítulo 4 de “El juego del calamar” aparece una leyenda de advertencia: “Algunas escenas tienen efectos estroboscópicos que pueden afectar a los espectadores sensibles”
¿Pero, por qué razón se da esta advertencia? Los expertos y algunos estudios científicos señalan que los efectos estroboscópicos pueden ocasionar problemas para personas sensibles a ellos, los cuales se ligan con epilepsia fotosensible, de ahí que se advierta a quienes tienen este padecimiento para que estén prevenidos.
El portal ClikiSalud de Fundación Carlos Slim señala que algunos tipos de epilepsia tienen como factores precipitantes la fotoestimulación (cambio de luces repetitivos), de ahí que a este tipo de personas se les recomienda también evitar videojuegos o programas de computación con cambio rápido de luces.
Epilepsia fotosensible
Para cerca del 3% de las personas con epilepsia, la exposición a luces intermitentes a ciertas intensidades o a determinados patrones visuales puede desencadenar convulsiones, de acuerdo con información de Epilepsy Foundation. Este fenómeno se conoce como epilepsia fotosensible, más común en niños y adolescentes y que se vuelve menos frecuente con la edad.
Epilepsy Foundation
El “shock Pokemon“
“El juego del calamar” no es el único que contiene estas escenas, ya antes Netflix había hecho la advertencia en series como “Umbrella Academy” y en “Stranger things”; de igual manera, Disney advirtió a las personas con epilepsia tomar precauciones a la hora de ver “Star Wars: The Rise of Skywalker”.
En el siglo pasado un episodio de la serie televisiva “Poket Monster” fue censurado a raíz de los problemas de epilepsia fotosensitiva, no por nada la prensa lo conoció desde entonces como “shock Pokemon”.
En 2004, un grupo de especialistas japoneses publicó un estudio que realizó en Aichi, Japón, para cerciorarse si efectivamente hubo niños que presentaron ataques epilépticos tras esta serie. Se enviaron cuestionarios a 75 hospitales y tres neurólogos pediátricos determinaron la presencia de síntomas por los efectos estroboscópicos. Resultado: este episodio se suprimió de la famosa serie de Pokemon.
No sólo las series
No sólo en las series como “El juego del calamar”, también los efectos estroboscópicos se han manifestado entre algunos espectadores de conciertos de música electrónica, sobre todo en individuos susceptibles, de ahí que investigadores neerlandeses advirtieran de las posibilidades que este tipo de luces aumenten el riesgo de un ataque epiléptico, de acuerdo con un estudio científico publicado en la revista BMJournals.
El dato de Uno
En el mundo existen 50 millones de personas que padecen epilepsia, de acuerdo con cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
¿De qué va la serie “El juego del calamar”?
La popular serie coreana refleja la historia de un grupo de personas con fuertes problemas económicos que tienen la oportunidad de salir de la miseria si participan en un juego.
“Jugar, respetar las reglas, llenarte de dinero como nunca lo hubieras imaginado, pero una mala decisión podría costarte la vida”, según detalla la sinopsis de Netflix.
Para el escritor y director Dong-hyuk Hwang, “El juego del calamar” está dirigida a ser una alegoría de la sociedad moderna.
Algo debe tener esta serie que se está convirtiendo en una de las favoritas de los espectadores, y ahora que ya te contamos de qué van los efectos estroboscópicos, no pierdas detalle cuando aparezca una nota de advertencia, y si conoces a alguien con esta predisposición, ¡adviértele!