En México se generan 42 millones de toneladas de residuos sólidos urbanos al año, y únicamente se recicla el 14%. Algunas botellas que podrían reciclarse son las de jugo, detergente o leche.
Alejandro administra la planta ALPLA Recycling, en donde cada año se procesan hasta 40 mil toneladas de botellas hechas de polietileno de alta densidad.
“Yo lo platico mucho, es difícil ver tirada en la calle una botella de PET, o una lata de aluminio, porque los recolectores entienden que esos envases tienen un valor. Nosotros tenemos la obligación de generar conciencia en toda la sociedad de que las botellas de polietileno también tienen un valor”.
Alejandro Torres, gerente de planta, Alpla Recycling
El costo de las botellas de polietileno de alta densidad
El kilo de este tipo de botellas puede alcanzar un precio de un peso con 50 centavos, en los centros de acopio, dijo Torres. Y agregó que su valor va más allá de lo económico.
“Se puede tener un ingreso adicional por la venta de estos materiales, pero también tiene beneficios ambientales, por ejemplo, el ahorro en emisiones de Co2, porque dejamos de extraer materia prima y volvemos a utilizar los recursos”, explicó Romina Dávila Martínez, vocera de iniciativa Vida circular.
“Cuando adquirimos un producto, tenemos que hacernos responsable no nada más el producto, sino del envase”.
Por esta razón, hace un llamado para separar estos residuos, ya sea para venderlos o para que los recolectores de basura los manejen con mayor facilidad, hasta llegar al punto de reciclaje.
“¿Qué hago yo con mi botella de leche de jugo o de detergente la colapso? Pues le pongo la tapa y la guardo para entregársela al camión de la basura sin lavar, porque es un gasto excesivo de agua. Nosotros vamos a lavar la botella aquí de cualquier modo”, destacó Alejandro Torres, quien añadió que el objetivo es generar una economía circular.
“Todos esos materiales tienen un valor en el mercado y pueden ser canalizados para tener una segunda vida, para producir otros productos, incluso el mismo producto. Por ejemplo; una botella puede volver a hacer una botella. Entonces es importante conservar estos recursos en un círculo virtuoso”.
¿Cómo saber si una botella es de polietileno de alta densidad?
Como se observa en el video, una forma de identificar las botellas de polietileno de alta densidad es con el Triángulo de Möbius, un símbolo formado por un número y rodeado de flechas sucesivas.
“Todos los envases de plástico en la base tienen un triángulo un número; el polietileno de alta densidad, tiene el número 2”, dijo Alejandro Torres.
[TE PUEDE INTERESAR: “Reciclaje: el arte de convertir la basura en moda en Colombia. Fotogalería”]
La realidad del reciclaje en México
70% de la basura termina en rellenos sanitarios que, en numerosas ocasiones, son tiraderos a cielo abierto, lo que ocasiona contaminación del suelo y el agua, así como afectaciones para la salud, afirmó Arcadio Monroy Ata, académico de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza.
El también responsable de la Unidad de Investigación en Ecología Vegetal de la entidad señaló que el principal obstáculo para el reciclaje de los desechos es que no se separan desde su origen y al mezclarlos pierden su valor y se convierten en basura.
Si se tomara el hábito de hacerlo, “casi todos podrían entrar a las cadenas de reciclaje”, y recordó que cada habitante de la Ciudad de México produce, en promedio, un kilo y medio de desechos al día.
De los residuos sólidos que se generan en el país, el 53% son orgánicos, los cuales además son húmedos porque se consume una cantidad importante de cítricos y otras frutas, lo que contribuye a que sean más pesados.
