La farmacéutica Eli Lilly ha anunciado que avanza en un ensayo clínico de fase 3 de su tratamiento con anticuerpos contra el COVID-19, el cual ha sido nombrado LY-CoV555.
En el ensayo se planea que participen dos mil 400 personas de la tercera edad. Esto incluye a residentes y personal de centros de atención para personas de la tercera edad, esto debido a que este sector de la población es particularmente vulnerable a la enfermedad de manera grave.
En junio pasado, Eli Lilly se convirtió en la primera farmacéutica en probar una terapia de anticuerpos en humanos contra el COVID-19. El LY-CoV555 fue creado en cooperación con la empresa de biotecnología AbCellera, a partir de un anticuerpo que fue identificado en una muestra de sangre la cual fue tomada a uno de los primeros pacientes estadounidenses que se recuperó de COVID-19.
“Estamos trabajando lo más rápido posible para crear medicamentos que puedan detener la propagación del virus en estar personas vulnerables”, dijo el director de Eli Lilly, Daniel Skovronsky.
El tratamiento contra la COVID-19 ya está siendo probado en hospitales para corroborar su efectividad y para acelerar el estudio, Eli Lilly ha creado unidades de investigación móviles que incluyen vehículos que pueden desplegarse en casos de rebrotes de coronavirus en hogares de personas de la tercera edad en Estados Unidos. Por ahora se esperan resultados positivos del ensayo para la etapa intermedia en el cuarto trimestre de la investigación.
¿En qué consiste el nuevo tratamiento COVID-19?
Mientras el mundo espera la llegada de una vacuna contra la COVID-19, el siguiente gran avance en la lucha contra la pandemia podría provenir de las terapias biotecnológicas que ya se usan ampliamente contra el cáncer y otros trastornos.
Las terapias consisten la utilización de anticuerpos monoclonales diseñados específicamente para atacar este nuevo virus, el cual ya ha sido respaldado por importantes científicos. Anthony Fauci, es el principal experto en enfermedades infecciosas de Estados Unidos, que calificó al tratamiento como “una apuesta casi segura” contra COVID-19.