La placa de Anatolia, formada hace 23 millones de años, fue la causante del terremoto de 7.8 que impactó Turquía dejando miles de muertos hace dos semanas y de los temblores que se registraron este lunes 20 de febrero, uno de 6.4 y otro de 5.8 provocando pánico, decesos y cientos de heridos.
¿Qué es la placa de Anatolia y por qué provoca temblores en Turquía?
Gran parte de Turquía se asienta en la placa de Anatolia, que está delimitada al norte por la placa euroasiática y al sur y este por las placas africana y árabe, que comprimen el territorio de Turquía, produciendo devastadores terremotos como los registrados el lunes 6 de febrero, según la sismóloga Arancha Izquierdo, consultada por la BBC.
“(La placa de Anatolia)”se encuentra en medio de las otras dos placas que, cuando se desplazan y acercan, lo exprimen y hacen que salga disparado hacia el oeste”.
Arancha Izquierdo, de la Red Sísmica Nacional de España
La placa de Anatolia “es una placa tectónica de la litosfera que subyace bajo la península arábiga y parte del Oriente Próximo“, explica la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH). Se empezó a formar hace 23 millones de años, durante el Oligoceno, a raíz de la fractura de la placa africana.
- En la actualidad, está colisionando constantemente contra la placa euroasiática, detalla la institución, “lo que convierte a la región en zona de terremotos frecuentes y actividad volcánica“, según recoge National Geographic, señalando que el terremoto del 6 de febrero se sintiera hasta en 14 países por su ubicación geográfica.
También conocida como ‘turca’ o ‘árabe’, esta placa se extiende a lo largo de la mayor parte de la península de Anatolia, en Asia Menor. Aunque los movimientos en las placas tectónicas son naturales, pueden tener estragos mortales sobre la superficie. Más en regiones como Oriente Próximo, cuyas ciudades no se construyeron pensando en la actividad sísmica.
¿Qué papel tuvieron las fallas de Anatolia?
Según la especialista, las placas forman dos fallas, que es como se denomina en el campo de la geología a las fracturas por las que se deslizan los bloques o placas tectónicas. Éstas son:
- La conocida como falla norte de Anatolia ha sido la más activa en las últimas décadas, provocando el sismo de Izmit en 1999 que cobró la vida de 17 mil personas.
- La falla oriental de Anatolia, donde tuvieron lugar los terremotos del 6 de febrero, de magnitud 7,8 y 7,5 respectivamente, no había registrado, sin embargo, una actividad importante en los últimos 100 años.
Cabe destacar que la falla norte atraviesa Estambul, es por eso que el más reciente temblor no afectó particularmente a la capital de Turquía, sino a las pequeñas poblaciones de la periferia. Los expertos advierten que si la del norte tiene actividad, provocaría un terremoto con posibles consecuencias trágicas.
Este tipo de fallas “pueden tener cientos de kilómetros de longitud y, cuanto más larga es la falla, más potentes son los terremotos“, señala la experta. “La placa árabe se mueve hacia el norte y empuja al bloque de Anatolia hacia el oeste, lo retuerce y subduce hacia el sur, entre los mares Egeo y Mediterráneo”, especifica Faure Walker, del University College de Londres.
La dificultad para predecir la frecuencia con la que van a producirse los terremotos, señala Joanna Faure Walker, viene de que el movimiento de estas fallas no es periódico y la posibilidad de que se produzcan réplicas es muy alta, ya que cuando se produce un terremoto en una de las fallas, al cambiar el estrés al que se someten las otras fallas cercanas, se incrementa la posibilidad de que se produzca otro sismo en una de éstas.