La sonda solar Parker de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA) logró volar por primera vez en la historia espacial, a través de una poderosa explosión solar que se encontraba cerca del Sol. El insólito hecho fue dado a conocer por el Laboratorio de Física Aplicada de la Universidad Johns Hopkins a través de un comunicado.
Sonda solar Parker atraviesa una explosión solar masiva por primera vez
La explosión solar masiva también llamada eyección de masa coronal (CME) ocurrió el pasado 5 de septiembre y según los expertos fue extrema.
Cuando Parker pasó detrás de la onda de choque, su conjunto de instrumentos de electrones, alfas y protones del viento solar (SWEAP) registró partículas que se aceleraban hasta mil 350 kilómetros por segundo.
Sin embargo, a pesar del poder de la erupción, la sonda Parker parecía imperturbable. Esto se debió a “su escudo térmico, radiadores y sistema de protección térmica que aseguraron que las temperaturas de la sonda nunca cambiaran”, dijo Jim Kinnison, ingeniero de sistemas de misión Parker Solar.
“Su sistema de autonomía incluso activó planes de mitigación para que la suite de aviónica funcionara sin interrupciones. De hecho, el único efecto que tuvo la CME en la nave espacial fue un ligero torque, un pequeño giro que rápidamente compensó, agregó Kinnison.
“Sabíamos desde el principio que Parker Solar Probe volaría a través de CME. Eso era parte de los objetivos científicos cuando se estableció la misión, por lo que diseñamos la nave espacial desde el principio con miras a sobrevivir y, mejor aún, realizar la misión científica mientras estamos en una CME. En general, Parker demostró ser robusto y bastante resistente, y todo el arduo trabajo realizado en la fase de diseño valió la pena”.
Jim Kinnison, ingeniero de sistemas de misión Parker Solar.
Según el comunicado, la nave espacial de la NASA pasó casi dos días observando la CME, brindando a los físicos una visión incomparable de estos eventos estelares y una oportunidad de estudiarlos en las primeras etapas de su evolución.
“Esta es la CME más cercana al Sol que hemos observado. Nunca hemos visto un evento de esta magnitud a esta distancia”, dijo Nour Raouafi, científico del proyecto Parker Solar Probe.
Atravesar una explosión solar masiva es un hecho sin precedentes
Este es un hecho sin precedentes toda vez, que según los expertos, “estas feroces erupciones pueden expulsar campos magnéticos y, a veces, miles de millones de toneladas de plasma a velocidades que oscilan entre los 100 y los 3 mil kilómetros por segundo”.
Además de que cuando se dirigen hacia la Tierra, estas eyecciones pueden doblar y moldear el campo magnético del planeta, generando espectáculos aurorales espectaculares.
No obstante, cuando las explosiones solares masivas son lo suficientemente fuertes son potencialmente capaces de devastar la electrónica de los satélites y las redes eléctricas terrestres.
Raouafi asegura que si esta superexplosión solar se hubiera dirigido hacia la Tierra, habría tenido una magnitud cercana a la del Evento Carrington, una tormenta solar de 1859 que se considera la más poderosa registrada en golpear la Tierra.
“El daño potencial de este tipo de evento, CME grandes y muy rápidas, puede ser colosal”, dijo Raouafi.
De hecho, los físicos han conjeturado que un evento de este tipo hoy, si se detecta demasiado tarde, podría desactivar los sistemas de comunicaciones y generar apagones en todo el continente.
¿Cómo fue posible atravesar la explosión solar?
Para lograrlo, la sonda Parker navegó por el lado opuesto del Sol a sólo 9.2 millones de kilómetros de la superficie solar, esto equivale a estar 36.8 millones de kilómetros más cerca de lo que Mercurio puede estar del Sol.
Sin embargo, antes de bordearla por su flanco, la sonda solar Parker detectó la eyección de masa coronal de forma remota. Posteriormente, la nave espacial entró en la estructura, cruzó la estela de su borde de ataque (u onda de choque) y finalmente salió por el otro lado.
Para lograrlo con éxito, el equipo científico determinó la cronología de los eventos y la ubicación de Parker durante la CME comparando las mediciones recopiladas dentro de la CME con las recopiladas fuera de ella, incluidas las imágenes tomadas por el instrumento de Investigación Coronal y Heliosférica Sun Earth Connection (SECCHI) en la nave espacial STEREO de la NASA .
Para ello, construyeron un modelo simple del evento, pero dado que nadie había tomado medidas tan temprano en el desarrollo de una CME, algunas piezas fueron difíciles de conciliar.
“Se prueban modelos simplificados para explicar ciertos aspectos del evento, pero cuando estás tan cerca del Sol, ninguno de estos modelos puede explicarlo todo”, dijo Orlando Romeo, físico espacial de la Universidad de California, Berkeley, y líder autor del nuevo estudio publicado en la revista especializada The Astrophysical Journal.
Los físicos han estado interesados en descifrar las fuerzas que impulsan estas explosiones estelares y aceleran las partículas a velocidades tan increíbles. Por lo que la única forma de hacerlo es volar a través de varias eyecciones más a medida que la sonda Parker se acerque cada vez más al Sol.