El holotransporte espacial de la NASA llegó a una nueva etapa, donde los astronautas no sólo son capacitados, sino que ahora pueden interactuar en 3D con gente que se encuentra en la Tierra. Y gracias a la mente brillante de un mexicano, esto fue posible.
En entrevista exclusiva con Unotv.com, Fernando de la Peña, CEO de Aexa Aerospace, detalló qué es y cómo funciona.
“Actualmente, estamos limitados a dos dimensiones a lo largo y ancho de la pantalla, la teleportación holográfica, lo que permite, es crear un holograma en tres dimensiones con volumen como si la persona estuviera ahí; entonces, estoy viendo a alguien a lo largo, a lo ancho y con un volumen de la persona. También si tiene algún objeto, si me quiere mostrar una máquina que hay que arreglar, puedo ver esa máquina en tiempo real y decirle: ‘Ah, quiero que tú le modifiques esta parte aquí para que la puedas arreglar’”, explicó.
¿Cómo funciona?
Fernando de la Peña explicó:
“Nosotros tenemos una cámara que permite capturar el volumen y el tipo de cámara; el sensor se llama laider, tiene un láser, la cámara o sensor no es diferente al que utilizan los policías cuando te están escaneando la velocidad, o al que tienen los nuevos teléfonos actualmente que permite capturar ese volumen; entonces, lo que hace es que primero recrea el volumen de la persona en tiempo real y luego nosotros tenemos unos lentes especiales que se llaman hololens, que te los pones y permite proyectar en tus ojos ese holograma”, dijo.
“La diferencia es que te permite interactuar con tu medio ambiente, o sea, no es como la realidad virtual en que estás adentro de un videojuego, sino que permite interactuar con las personas con las que estoy, y al mismo tiempo interactuar con hologramas, que es diferente si tengo un holograma en frente de mí, una persona yo lo puedo tocar. Yo puedo interactuar con esa persona como si fuera una persona real y funciona en dos vías”, agregó.
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¿Para qué sirve?
De la Peña mencionó que gracias a que las personas pueden interactuar, los astronautas no sólo podrán reparar fallas técnicas, sino que podrán atender problemas de salud y beneficiar su estado mental.
“En el espacio tenemos dos problemas, si algo sale mal, pues tenemos, por lo regular, seis astronautas en la Estación Espacial, en la Luna y en Marte va a suceder algo similar, vamos a tener tripulación muy limitada. Vamos a suponer que un astronauta se enferma, podemos al día de hoy teletransportar al doctor por medio de tecnología y puede diagnosticar al astronauta. Si está enfermo, lo puede checar, cuál es su situación, o podemos igual mandar un ingeniero si se descompone algo”, explicó.
“Pero hay otro componente muy importante en la Estación Espacial, pasan seis meses a un año, por lo menos, imagínate: ya lo vimos durante el COVID; imagínate vivir aislado como en tu casa con tu mismo grupo casi un año, vienen problemas de depresión; allá pasa lo mismo y al tener depresión, pues tu eficiencia baja. Con esa tecnología lo que permitimos es que los astronautas se puedan teletransportar con sus familias y puedan tener una cena, compartir un juego de mesa o simplemente convivir, y con eso amplían el círculo de con el que están interactuando”.
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No sólo ver al holograma, también tocarlo
Detalló que también buscan implementar más tecnología para que no sólo se pueda ver a la persona como un holograma, sino también tocarla.
“También la vas a poder tocar, entonces todo esto empieza por el lado médico. Nuestro programa está financiado por NASA por un área que es médica, pero la primera finalidad es por ejemplo cuando vas al médico lo primero que te checa son los ganglios y ver que no están inflamados, entonces con esta tecnología lo que estamos haciendo es que el médico pueda tocar al astronauta, ver si no está enfermo. También va a ser importante que la gente que está en el espacio, pueda tocar a sus seres queridos en la Tierra”.
Y justamente para que el tacto pueda estar presente, Aexa Aerospace hizo una alianza con otra empresa en Estados Unidos, la cual desarrolló unos guantes y un traje, hasta los pies, especiales para lograrlo.
“El traje te va a permitir que por medio de sensores muy pequeñitos puedas sentir algo en cualquier parte del dedo o en la mano. De calor, el frío, la presión y también lo puedes sentir en todo el cuerpo, hasta los pies, entonces lo que hacemos, es que lo incorporamos y lo que hace nuestra tecnología que se llama “visión de computadora”, analiza todo, determina los objetos, qué tan sólidos son, lo que hay y eso le manda señales al guante, entonces si veo que una persona me está estrechando la mano como holograma, el guante me va a permitir detectar esa presión y yo aquí en la Tierra voy a sentir que me está apretando la mano”.
Tecnología pareciera inalcanzable, pero llegará este año
Aunque esta tecnología pareciera inalcanzable, Fernando de la Peña espera que este mismo año puedan lanzarla a todo el público con un precio muy económico, controlado con cualquier dispositivo móvil que tenga internet.
“El plan que traemos es para final del tercer trimestre de este año, es lanzar la tecnología y que funcione con cualquier dispositivo, si tú puedes comprar los nuevos lentes que te permiten ver hologramas, está bien, si no tienes acceso a eso, si quieres usar realidad virtual que cuesta 200 dólares, lo puedes usar o inclusive puedes usar tu teléfono o tu tablet, que todo mundo tiene y lo vamos a hacer universal, queremos democratizar la tecnología. Yo creo más en el mercado de las masas, entonces vamos a lanzar precios en que alguien pueda pagar su suscripción, pasándotelo a pesos, de 199 pesos al mes”.
¿Cómo nació la idea del holotransporte espacial?
Pero un momento. Para llegar hasta aquí, hay que rebobinar varios años atrás al momento en el que nació esta idea.
“Esta tecnología teníamos pensada lanzarla en 2025, pero por el COVID, la lanzamos antes de lo previsto. Nace porque nosotros desarrollamos software por medio de hologramas para entrenar los astronautas de la NASA. Pusimos nuestra tecnología en una base que tienen en el fondo del mar en Florida, e hicimos una simulación como un problema médico, uno de los astronautas que ahorita está en el espacio, Samantha Christopher, veía que uno de los astronautas tenía un problema y se colocaba nuestros lentes, se comunicaba con un doctor en Houston, donde uno de los cirujanos, por medio del holograma, le decía cómo diagnosticar y curar el paciente”.
“El doctor Josh Smith me preguntó que qué más podíamos hacer porque a la gente no le gustan los avatars, que son representaciones como caricaturas o una imagen que no se mueven los ojos, y fue cuando vimos que podíamos crear una teleportación holográfica. Vi que Microsoft desarrolló algo similar en 2016, pero ellos requieren 105 cámaras, un estudio y no es en tiempo real: dije: ‘Pero yo creo que podemos hacerlo de una manera portátil y que no ocupemos más que un ancho de banda de 5 megabytes por segundo‘; lo pudimos hacer, nos apoyaron los de Microsoft porque son un socio estratégico que tenemos”.
Tienen un programa para que estudiantes conozcan las nuevas tecnologías
El CEO de Aexa Aerospace explicó que para compartir estas experiencias a los jóvenes, crearon un programa especial.
“Recibimos estudiantes cada año por medio del Programa Internacional del Aire y el Espacio. Cuando estaba chico, y al igual que muchos, lo que ves es que no tienes acceso a tecnologías. Yo creo que la gente en México es muy brillante. Desafortunadamente, los científicos mexicanos hacen maravillas con lo que tienen, les dan muy poco. Entonces, con nuestro programa, por una semana, vienen estudiantes a un centro espacial y se entrenan como si fueran astronautas, aprenden a pilotear aviones y los ponemos a bucear como hacen los astronautas, a buscar soluciones”.
“Además, les permitimos que manden muestras a la Estación Espacial Internacional, lo pueden monitorear, les permitimos, hasta donde se pueda, que tengan las manos en el espacio y la verdad es que hemos ido muy bien al día de hoy, en el programa que originalmente empezó con gente de México y Latinoamérica, tenemos estudiantes de todo el mundo, en India, ahorita somos una sensación”.
Fernando de la Peña: “Desde niño tengo mis trajes de astronautas”
El nacido en Tulancingo, Hidalgo, recordó que sus padres siempre lo apoyaron y fueron quienes lo aceraron a sus primeros aparatos tecnológicos.
“Yo desde niño tengo mis trajes de astronautas; desde los 4 años yo tuve mi primera computadora; siempre me gustó mucho la tecnología. Mi papá en ese entonces, estoy hablando del 80, por ahí, ya tenemos computadoras de touch screen que era una pantalla verde horrible, pero a él siempre le gustó la tecnología y mis papás me dieron acceso a la tecnología y pues siempre aprendí a soñar con el espacio”.
“Además, soy de Tulancingo y tiene unas ‘antenotas’ que fueron las primeras que se utilizaron para transmitir los Juegos Olímpicos y yo lo que les digo siempre es que la gente de Tulancingo siempre estuvimos expuestos a ver al espacio por las antenas, entonces siempre tuve este sueño desde chico”.
Fernando de la Peña recordó que de niño no era el de las mejores calificaciones. “Yo nunca fui un estudiante muy brillante en la escuela, sacaba mis notas 7 y 8, créeme que no era yo muy bueno. En la universidad empecé reprobando cuando entré, ya después me compuse, pero algo que tenía muy fijo era la visión de sacar las cosas adelante y de no darme por vencido”.
Pero el esfuerzo y la preparación, pues actualmente cuenta con dos maestrías y un doctorado, lo llevaron a estar en la élite de la tecnología espacial.
“Lo único que hice fue marcarme metas alcanzables y realizarlas. Por el lado académico, pues tengo dos maestrías y un doctorado, fue prepararme. Por el lado empresarial me considero que he sido exitoso de haber probado varias empresas; Aexa tiene poco más de 10 años, pero no fue la primera; y la parte de la innovación, lo del holotransporte, no fue el primer proyecto con la NASA”.
Además, el hecho de ser mexicano nunca truncó sus metas en Estados Unidos, pues siempre, además de su preparación, se ha rodeado de un gran equipo.
“Cuento con un equipo, con gente que tiene 80 años, que son muy buenos y muy inteligentes. Hasta mis millennials de toda la gama de arriba hacia abajo y cuando platicamos vienen muy buenas ideas, entonces tiene un buen equipo con gente preparada, muy interdisciplinario y multigeneracional. Todos somos ciudadanos globales y yo desde el inicio me planteé no ser el mejor en mi minoría (en Estados Unidos) sino ser el mejor de todos. He tenido ocasión de estar con presidentes y gente importante, pero ellos también tienen temores, aspiraciones, son igualitos que yo”.
¿Qué es lo mejor de trabajar con la NASA?
El mexicano explicó que aunque en la NASA nueve de cada 10 personas son contratistas, son empresas que más allá de tener una rivalidad, se ayudan entre todos.
“En el último proyecto empezamos a las 6 de la mañana; eran las 5 de la tarde y todo mundo seguíamos. Cada vez que teníamos la reunión y que veías que en la videoconferencia prendía la lucecita de alguien, todos proponíamos una solución, nunca escuchabas crítica porque era ayudarnos entre todos. Sabes que aunque hay otras empresas, a lo mejor se pueden beneficiar de que tú falles, se ayudan o nos ayudamos entre todos, la última vez probamos una solución y funcionó”.
No ponerse límites
Fernando de la Peña confesó que hay dos aspectos fundamentales para triunfar: no ponerse límites y tomar lo mejor posible las críticas.
“El primero es que el que se limita es uno mismo. También es bueno tomar la retroalimentación de la gente, muchas veces cuando te dicen algo que no te gusta, te molesta y te pones a la defensiva, algo que aprendí es decir: ‘ok, valoro, tu opinión, la acepto’, y ya después que pasan tres o cuatro días, lo analizo. La verdad es que sí es cierto, muchas veces en una crítica te encuentran una falla, entonces tratar de aceptarla”.
Además, dijo que uno de los mejores consejos que le puede dar a los niños y jóvenes es que sueñen alto y que no dejen que nadie les “mate” sus sueños.
“Muchas veces escuché cosas de ‘sé realista’, o ‘eso no es para ti’ y es lógico porque si la gente no lo ha experimentado, cree que no se puede”.
“Lo más importante es que si tienes una idea, protege ese sueño, no dejes que nadie te quite esa oportunidad porque cuando haces lo que te gusta, pues hasta trabajas con gusto y lo más bonito es que te pagan. He tenido la oportunidad de platicar con Vinton Cerf, el que creó el internet, o con mucha gente muy muy inteligente, y lo que han tenido es no darse por vencidos. Steve Jobs es de Siria, Elon Musk es de Marruecos. Muchos que has visto que han tenido mucho éxito son gente que tuvieron la adversidad en contra y cuando tienes eso en contra te ayuda a ser más exitoso. La única diferencia es que no se rindan y que sigan y sigan y sigan luchando”.
Trabaja con la NASA para traer “Avatar” al mundo real
Ahora, siendo contratista de la NASA, dio un adelanto de lo que se espera lograr a futuro.
“Estamos trabajando una tecnología que no puedo platicar mucho, es un poco prematura para la Luna, entonces lo que tratamos de hacer es que con esta tecnología no sólo te muevas como holograma, sino proyectar el mismo logrado arriba. Es un robot que ya tenemos, lo que va a suceder es te vas a poder mover como si estuvieras ahí en la Luna”, dijo.
“Ya no ver diferencia y tú vas a poder transportarte a Marte sin dejar tu espacio físico y vas a tener un cuerpo o un robot que se va a sentir como si estuvieras ahí, vas a poder sentir lo que hay a tu alrededor, te vas a poder desplazar y literalmente tu cuerpo va a estar aquí en la Tierra. Entonces es lo que estamos haciendo como tipo la película “Avatar”, pero nada más que no tan elaborado; el robot con el que estamos trabajando ahorita le falta mucho para llegar ahí, pero creemos que lo vamos a poder implementar en la misión Artemisa, de que va la Luna y pues si le das otros 20 años, pues este robot va a ser mucho mejor”.
Su legado, democratizar la tecnología
Más allá del aspecto económico, Fernando quiere dejar un legado más importante para las futuras generaciones: que la tecnología sea accesible para la humanidad.
“Lo que yo quiero es que sean cosas útiles para la humanidad, no cosas que me generen riqueza, digo, no estoy peleado con que genere riqueza, pero que sean cosas útiles, entonces por eso, por ejemplo, lo de la teleportación holográfica lo puedo lanzar muy caro, lo puedo lanzar a que me genere bastante dinero, pero lo que prefiero es democratizar la tecnología, que podamos usarla y que les ayude, por ejemplo, a que un médico desde Houston se pueda teletransportar a la sierra de Chiapas, o en Oaxaca, donde tú quieras; ése es parte del legado, realmente, no sólo el crear, sino el hacerlo accesible a la humanidad”.
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